Ingredientes:
-Medio paquete de Philadelphia Light-Media taza de harina-Un cuarto de taza / media taza de azúcar blanco (depende de tu gusto)-Leche condensada-El zumo de medio limón-Un huevo-6 Chips Ahoy o galletas del estilo
Para hacer la base de galleta de la tartita, machacamos las galletas Chips Ahoy. Yo lo hice en un aparato especial que tenemos de cuyo nombre no quiero acordarme, pero puedes tirar de mortero y un poco de paciencia. No hace falta que la reduzcas a polvo, sólo ha migas. Si tienes algunos grumos hasta mejor. Mezclamos las galletas machacadas con un chorrito de leche condensada. Lo amasamos con las manos hasta que tenga una consistencia pastosa, vamos agregando más leche condensada si es necesario. Ponemos una fina capa de la pasta que acabamos de crear en nuestros moldes previamente engrasados.
Para la tarta propiamente dicha, batimos en la batidora la Philadelphia, la harina, el azúcar, un chorro generoso de leche condensada (al gusto) y un huevo (el mío era campero y por eso me quedaron tan amarillas las tartaletas). También echa el zumo de medio limón. No sé para qué sirve. Pero en todas las recetas lo incluía así que yo lo eché a la mezcla por miedo a que pasase algo desastroso.
Las metí al horno a 190º durante un cuarto de hora más o menos, y este fue el resultado.
No se parecen mucho a la tarta de queso, pero no estaban mal del todo! Claro, siempre puedes sustituir mis ingredientes por los auténticos que se usan para la tarta de queso y te quedarán más parecidas a la cheesecake tradicional. Pero como dice Juno: "Supongo que la normalidad nunca fue nuestro estilo".
Fuente: este post proviene de El Arte de las Cosas Nimias, donde puedes consultar el contenido original.
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