Ingredientes:
2 cdas cacao en polvo.
2 tazas de harina.
2 cucharaditas de polvo para hornear.
1 pizca de sal.
100g. chocolate semiamargo.
1 barra mantequilla sin sal.
300g de azúcar.
2 huevos.
1 taza de leche.
300g. cerezas.
1/4 taza jugo de cereza.
2 cdas. de maicena.
1 taza de kirsch.
500 ml. crema batida.
1/4 taza de chocolate en polvo.
Preparación.
Cernir el cacao, la harina y el polvo para hornear y la sal.
Meter la barra de mantequilla por 20 segundos al microondas en un tazón para que se ablande, en seguida verter el azúcar y batir hasta obtener una crema de consistencia ligera. Agregar los huevos de uno por uno batiendo hasta mezclarlos bien. Agregar removiendo el chocolate en polvo, aumentamos la leche y para finalizar la mezcla que teníamos de la harina.
En dos moldes previamente engrasados y enharinados, vertemos la mezcla por partes iguales. Hornear a 180° por 40 minutos o hasta que al picar el pan con un tenedor (o mejor con un palillo de dientes), éste salga limpio. Dejar enfriar.
Para hacer el relleno que unirá los dos panes, calentamos las cerezas en una cacerola, mezclando el jugo de cerezas con la maicena y dejando hervir hasta que espece. Dejar enfriar hasta que este tibio. Rociar los pasteles con kirsch. Poner las cerezas en el primer pastel y cubrir con el segundo. Batir la crema y untar al pastel hasta que quede cubierto, decorar con chocolate rallado y cerezas.