Orígenes
Muchos eruditos afirman que esta técnica ya era practicada por antiguas culturas árabes, sudamericanas y china debido a lo sencillo de su mecanismo. Sin embargo, no existe ninguna prueba arqueológica o etnográfica que sostente aquello. De lo que sí se tiene seguridad es que se hizo popular en Europa en la época del siglo XVI. Las primeras instrucciones que hacían alusión a este método fueron publicadas en Alemania en 1824.
Historia
En Irlanda y Francia, el crochet fue una estable industria hogareña que fue conformada por mujeres y niños, quienes tejían ropas y mantas para ganar dinero, en un contexto muy convulso de guerras y cambios climáticos que dañaban las cosechas. Las prendas eran adquiridas por personas de la clase media, quienes querían lucir algo más elaborado. El ganchillo tuvo tanta acogida que hasta la reina Victoria aprendió a tejer.
Proceso de fabricación
Vamos a empezar a aprender crochet haciendo unos zapatos para bebes. Estos zapatos están indicados para niños de 0 a 3 meses y tienen un diseño muy fácil de hacer. Iniciamos con la plantilla, la cual posee tres filas de tejido. Los bordes también están compuestos por tres filas; una fila de barretas y dos filas de media barretas. La punta del zapato está trabajada, igualmente, en punto de barretas.
Finalizando este orden de ideas sobre el crochet, continuamos con la caña del zapato o botita, el cual tiene cuatro filas de barretas y por último, una fila de puntos bajos. Para ornamentar el zapatito, le podemos colocar un cordón con borlitas en las puntas o una cinta de raso, lo cual le viene muy bien a una niña.