Cogemos una bandeja de las que vienen con alimentos, cortamos dos cartones a la medida para hacer los separadores y los pegamos bien.
Hacemos varias capas de cartapesta con trozos de periódico por todos los lados de la bandeja hasta que alcance la consistencia que queremos, dejando secar bien entre capa y capa y lijando para igualar.
Damos dos manos de imprimación y pegamos la servilleta (dividida en tres trozos) en la base.
Pintamos el resto de la bandeja de un color que combine con la servilleta y los bordes y la parte superior de los separadores de un color más oscuro que destaque. Y cuando esté bien seco damos dos manos de látex un poco aguado.