Convertir un rinconcito de nuestra casa, en un escenario que nos aporte ese soplo de color y alegría primaveral es muy fácil y muy económico. Necesitaremos:
Unos frascos de cristal
sal
tizas de colores
una cinta decorativa adhesiva
velas de colores
Y muchos diréis...,! eso me suena a cuando era pequeño!! Si, seguro que much@s habréis hecho esta manualidad en el colegio o en vuestra infancia. Teñir sal de colores con tiza. Nada tan fácil como extender sal encima de un papel, y rodar una tiza encima de la sal hasta que se va tintando poco a poco. Cuanto más insistamos más vivo resultará el color.
Así de simple, echamos la cantidad de sal con color que nos guste en el frasco de cristal y colocamos la vela que hemos elegido. Después pegamos una cinta decorativa de un color alegre y que combine en el borde del frasco.
Es un DIY muy muy sencillo, pero que nos da un toque alegre y fresco. A mi el resultado me encanta y sobre todo porque es algo que con un par de Euros podemos hacer.
¡¡¡Seguro que os animáis a hacer uno de estos portavelas tan primaverales!!