Amigurumi (????? lit. peluche tejido) es una tendencia o moda japonesa que consiste en tejer pequeños muñecos mediante técnicas de croché o ganchillo. Los amigurumis toman forma principalmente de animales como ositos, conejos, gatos o perros, pero también adquieren otras formas como comidas, plantas, e incluso accesorios como bolsos, bisutería, etc. Casi cualquier cosa que puedas imaginar se puede convertir en amigurumi.
El amigurumi es en Japón algo más que un simple pasatiempo, ya que forma parte de la cultura de lo kawaii, término que podría traducirse como mono, tierno, adorable; son esos dibujitos japoneses de animales o personajes con la cabeza grande y el cuerpo pequeño.
Más allá de su uso como figurita decorativa o juguete, el objetivo que persiguen los amigurumis es alimentar el espíritu de niño que todos llevamos dentro. Según la costumbre, cada amigurumi posee un "alma" que lo convierte en el compañero y confidente de por vida de su dueño, proporcionándole protección y consuelo en los momentos de estrés y tristeza.
Estas figuritas son objetos de apego ligados a conceptos de amistad, complicidad y compañía. Proporcionan protección y seguridad a su propietario. En algunos casos, son usados como amuletos personales y también en casas, negocios y puestos de trabajo. En Japón, es usual verlos en las oficinas, al lado de los ordenadores como un símbolo de apego o adorno personal, o como recordatorio de respirar, sonreír y hacer una pausa.
Con esta técnica se consigue hacer auténticas maravillas. Una vez hayas hecho unos cuantos, te darás cuenta de que no son tan complicados de hacer. Hay que tejer todas las partes por separado y después coserlas.
Para comenzar a tejer nuestros amigurumis lo único que necesitaremos es una aguja de ganchillo, un poco de lana y algo de paciencia.
Existen varias formas de empezar a tejer nuestros amigurumis, pero las más usadas sin duda son el círculo o anillo mágico y la cadeneta. Una vez iniciado el tejido, los puntos se trabajan en espiral, sin unirse al final de cada vuelta, creando un tejido muy apretado que posteriormente rellenaremos con fibra de relleno.
Los amigurumis se hacen generalmente por partes, es decir, el cuerpo, la cabeza, las extremidades, las orejas, la cola,... y luego se rellena y se cosen las diferentes partes para hacer un muñeco o un animal completo. A menudo, se utiliza hilo de bordar para crear los detalles, elementos decorativos o para hacer los ojos, las orejas u otras partes del amigurumi, aunque también se usa para los ojos, boca, nariz, ojos de seguridad (hay que colocarlos antes de rellenar la pieza), o incluso pegando pequeños trozos de fieltro o diversos materiales.
Las formas básicas son círculos y óvalos principalmente. Para que el círculo empiece a tener forma alargada (para el cuerpo o brazos) tendrás que dejar de aumentar y la misma labor empezará a parecerse a un cilindro.
Por ejemplo para hacer una cabeza redonda, puedes hacerlo de varias formas: trabajar dos círculos iguales (ver ejemplo) y después coser las dos mitades. O si no, ir aumentando progresivamente (como si estuvieses haciendo un gorro) y cuando tenga la anchura deseada, dejar varias vueltas sin aumentar y luego ir disminuyendo poco a poco hasta cerrar. En función de lo alargada que quieres la cabeza tendrás que dejar más o menos vueltas sin aumentos ni disminuciones. Si quieres una cabeza totalmente redonda, tienes que tejer tantas vueltas sin aumentos como vueltas con aumentos hayas hecho. Es decir, si has estado haciendo aumentos hasta la 5ª vuelta, luego tienes que tejer 5 vueltas más sin aumentos y luego, otras 5 vueltas con disminuciones.
Así que ya sabéis, si estáis pensando en empezar a tejer vuestros propios amigurumis os aconsejo que empecéis por aprender los puntos básicos para tejer amigurumis.
Y recordad, sed creativos, aprended cosas nuevas, experimentad con nuevas técnicas y buscad herramientas que hagan que vuestro trabajo sea más agradable y gratificante, por no decir más fácil. El mundo del crochet renace y lo hace con fuerza, y con muchas técnicas que explorar.
Qué, ¿ya estáis listos para coger hilo y aguja y crear un poco de magia?