Así que vengo cargadita de plumas de colores y de tela. Un DIY que se hace en un ratito y a la par es mono y resultón (mis favoritos). La ventaja de usar plumas de telas es que las puedes hacer con la forma y color que más te convenga y de paso, no desplumamos a nadie ¡las plumas, no salen de los árboles!
los materiales
Vamos a necesitar pintura para tela, un pincel, tijeras y tela de un tono claro.
Las pinturas que nos mandaron, tienen muy buena pinta, cunden un montón y vienen en tres modalidades. Una muy cubriente que permite pintar incluso sobre telas oscuras. Otra más líquida, con colores muy (¡pero muy!) vivos, que sólo se puede usar sobre tela blanca. Y la más carnavalesca entre las carnavalescas ¡pintura de tela de purpurina! en dorado y en plateado ¿Qué sería de un carnaval sin purpurina?
los pasos
Para pintar las plumas lo haremos en tres veces. La primera capa es el fondo de la pluma, yo aproveché que los colores se mezclan muy bien entre sí, para crear diferentes tonalidades. Además no hace falta hacerlo perfecto, porque luego las recortaremos. lo que sí hay que tener cuidado es con poner algo debajo, ya que la pintura traspasa la tela.
Esperaremos unos minutos a que se seque, para evitar que se mezcle ¡y a pintar con purpurina! Veréis que queda “blanquecino” esto desaparece cuando se seca y queda sólo la purpurina. Podéis pintar la pluma entera por encima y luego quedará transparente, dejando ver el color inicial. En la siguiente foto, se puede ver cómo es antes de secarse.
Finalmente, con el pincel más pequeño, hacemos los detalles de puntos y líneas. Esto sí, con la pintura que más cubre.
Sólo nos queda dejarlo secar ¡y recortarlas! No os preocupéis por que se deshilache, ya que la propia pintura, lo evita.
Finalmente, para darle más vidilla a la pluma, haremos cortes en diagonal, incluso nos podemos llevar algún trocito y queda bien.
Como plumas hay de todos los colores, formas y tamaños ¡imaginación al poder! Y en un ratillo, tienes listas plumas carnavalescas para dar un toque DIY de última hora a tu disfraz.
¿Qué os parece la idea? ¿Vosotras sois de comprar los disfraces o preferís hacéroslos?
Yo ya sabéis que tengo una relación amor-odio con los carnavales… Y si aún no lo sabes ¡aquí tienes el por qué!
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Fuente: este post proviene de I am a Mess, donde puedes consultar el contenido original.
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