La sección Reconstrucciones de esta semana llega un poquito más tarde de lo habitual (en domingo en lugar de viernes), pero es que estas fechas son una locura y no me da la vida para hacer tantas cosas.
Esta vez les ha tocado el turno a unos pendientes muy sosos que hice en blanco y negro. Una de las primeras cosas que hacía allá por el 2009 con las primeras pastillas de arcilla polimérica que compré, y basándome en este tutorial, que, milagrosamente he vuelto a encontrar después de tantos años.
Éste es el antes:
Vamos, que no se parecen a los del tutorial ni por asomo, y encima son bastante sosillos, pero anda que no me los he puesto veces...
En la versión reconstruida he querido ser fiel al tutorial (pero bien, no como la primera vez), y darles un toque que los haga un poco más vistosos con algo de textura en el fondo. Además, en lugar de aplicarles barniz cerámico como solía hacer, les he dado un brillo más sutil con cera de suelo, que queda más satinado y mucho menos pringoso.
Éste es el después:
Mucho mejor. No son gran cosa, pero a mí me gustan más, y son bastante discretos, que es lo que buscamos cuando vamos de blanco y negro.
Ya estoy preparando la próxima reconstrucción, así que el viernes que viene, más.