Pues nada, que ya se ha acabado lo bueno… ¡adiós vacaciones, bienvenida normalidad!
¿Qué tal te ha probado el verano? Yo vengo encantada pues, aunque mis vacaciones han sido de lo más normalito, he podido descansar y, al mismo tiempo, disfrutar sin agobios del placer de darle a la aguja… la culpable en gran medida ha sido… ¡la hora de la siesta!
Antes de empezar la entrada de hoy quiero disculparme con todas las personas que por un medio u otro han contactado conmigo a lo largo de mi ausencia y agradecerles su paciencia en la espera de la respuesta que, por fin, se ha producido hoy.
Este año las vacaciones las he pasado en familia, con todo lo que eso representa, y mi familia es de las que cumple la tradición de las siestas veraniegas, esas siestas épicas de pijama y orinal que aprovechan las horas del día en la que la calor es menos soportable. Yo no soy siestera, no porque no me guste dormir, que me encanta, sino porque mi estómago no las admite y si se me ocurre hacer una siesta me levanto fatal, con digestiones pesadas y la cabeza embotada, por lo tanto hace ya tiempo que decidí dejar de hacerlas. Así es que el tiempo de esas largas siestas, en las que además hay que guardar un obligado silencio para que el resto de los miembros de la familia puedan cumplir con su ritual, se convierten en el mejor momento del día para aprovecharlo cosiendo con una calma total y absoluta. Sólo hace falta un sofá cómodo, musiqueta y un buen ventilador… y ¡todo eso lo tenía!
Las horas de la siesta de estas vacaciones me han permitido mantener al día el Splendid Sampler en los bloques realizados a mano… cualquiera se atrevía a ponerse a coser a máquina a esas horas (el próximo día te mostraré qué tal lo llevo) y terminar un proyecto que hacía mucho que tenía iniciado pero que entre una cosa y otra llevaba meses durmiendo el sueño de los justos en un cajón, el proyecto en cuestión es un tapiz de Pachwork para una bebita muy especial, Elene.
Peek-a-boo (AnAnAs)
Para realizarlo elegí un patrón que tenía desde hacía bastante tiempo, el Pekk-a-boo de Anny Bradley Designs, un patrón cuyo pdf puedes descargarte aquí, y las medidas, una vez terminado, son 80 x 80 cm, con nueve bloques de 20 x 20 cm.
Peek-a-boo (original)
El patrón está planteado como una aplicación con festón, pero preferí hacerlo como una aplicación invisible porque pensé que las caritas de los niños sobresaldrían más del tapiz si una vez aplicadas les hacía el acolchado sobre el borde.
Para la elección de los colores utilicé, como en el modelo, colores muy vivos que estimularan la atención de la pequeña destinataria, aunque utilicé varios detalles en violeta porque ese es el color favorito de la mamá de la criatura y el que ha elegido para decorar la habitación, sin embargo, para evitar un excesivo abigarramiento de colores, el tejido de fondo es prácticamente blanco y liso, solo presenta pequeñas manchas en tonos pastel de los colores vivos que componen los motivos:
Tejido de fondo
Plantearlo como una aplicación invisible me hacía perder el borde negro que representaba el festón y que le daba ese aspecto de dibujo al diseño, por lo que tuve que comerme el coco para ver cómo solucionarlo, al final no se me ocurrió otro remedio que bordar una pasada de pespunte después de haber realizado la aplicación, que delineara los motivo tal como se hace en el punto de cruz y que mantuviera el estilo de otros detalles que ya estaban pensados para ser bordados en el diseño original, como los cabellos de los niños, por ejemplo. Representaba una complicación añadida y más trabajo a la hora de terminarlo, pero el resultado se ajusta exactamente a lo que quería conseguir por lo que me siento muy satisfecha.
Detalles bordados a mano
Si sigues regularmente el blog ya te habrás dado cuenta que me gusta mucho trabajar a mano ya que lo encuentro muy relajante, así es que el tapiz está totalmente realizado a mano, tanto en la aplicación, el bordado y el acolchado, y para lo único que he utilizado la máquina de coser es para añadir las bandas intermedias y los bordes del quilt.
El haber contado con horas suficientes para llevarlo a cabo me ha permitido, al mismo tiempo, poder realizar un elaborado trabajo de acolchado en todos los bloques que componen el quilt. Como ya he comentado, primero realicé un acolchado a lo largo del borde del motivo para hacer que sobresaliera:
Acolchado en el borde de los motivos y en eco
A continuación realicé un acolchado en eco sobre los fondos de cada motivo para incrementar ese efecto de relieve.
Y, por último, acolche una cenefa en las tiras que separan los bloques y en el marco exterior del quilt. Esa ha sido la parte menos elaborada, pero las vacaciones ya se acababan y quería dejar el trabajo terminado antes de volver a mi día al día.
Cenefa acolchada en los bordes del quilt
En cuanto a los detalles, he utilizado pintura textil para formar las pupilas de los ojos de los niños puesto que eran demasiado pequeñas para ser aplicadas, he puesto botones forrados con la misma tela del ribete en las intersecciones de las cenefas y en la diadema de la niña de uno de los bloques -a la que también le he añadido un yoyo–, y por último, he personalizado el quilt con el nombre de la protagonista, esta vez sí en aplicación con festón.
Personalización del quilt
Ahora solo me falta preparar una bonita etiqueta para podérselo regalar a Elene (y que espero terminar lo antes posible, porque al paso que voy, en vez de un regalo de nacimiento va a ser un regalo de boda ), y entonces enviarlo a muchos kilómetros de aquí, que es donde reside ella.
Y tú, ¿has podido realizar muchas labores y manualidades a lo largo de este verano? ¿Por qué no me dejas un comentario explicándomelas?
A partir de hoy empezamos una nueva etapa en el blog, voy a intentar por todos los medios (posibles e imposibles ) realizar dos entradas semanales (los miércoles y los sábados), que espero que te resulten muy instructivas y te animen a realizar muchos nuevos proyectos. También se van a ir produciendo bastante novedades, estoy muy contenta de los resultados que el blog ha ido teniendo a lo largo de los meses que está en activo y deseo mejorarlo en muchos aspectos, pero ya sabes que eso está condicionado al tiempo de que disponga y desgraciadamente no es tanto como querría, así que tengo que ir poco a poco. Si todavía no estás suscrita al blog y quieres ir recibiendo en tu correo electrónico todas las actualizaciones y novedades que se vayan produciendo, te recuerdo que puedes convertirte en seguidora del mismo dándole al botoncito que hay un poco más abajo, también puedes ayudarme a conseguir más visitas si compartes las entradas en tus redes sociales.
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Muchas gracias por leerme,
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