Mandala es un término en Sanscrito que representa una forma artística con múltiples significados e interpretaciones como son la religión, el espíritu, la curación, el centro de energía, la meditación, la armonía, además de un modo de reflejar el estado de las personas que lo realizan tanto por las formas como por los colores escogidos.
Mandalas y su origen:
El mandala surge de la India ancestral y su nombre significa rueda o círculo, por lo que se representa principalmente con formas circulares u ovaladas, aunque también se realizan con otro tipo de figuras geométricas que buscan la armonía en torno a punto central.
Respecto al origen occidental, fue el psicólogo Car Gustave Jüng una de las primeras personas en introducir la creación de mandalas como técnica para ayudar en la relajación, los trastornos de depresión y el estrés.
Mandalas y sus interpretaciones:
Los mandalas son cada vez más conocidos por su atractivo y armonioso colorido. La mayoría de las personas que los realizan no conocen que estas manualidades (dependiendo del dibujo realizado, la forma y el color) tienen un gran significado y muestran información del estado de ánimo de la persona, de su forma de ser, etc.
Existen diversas interpretaciones según las personas que realiza la mandala, por ejemplo:
En el budismo:
Está muy vinculado a la meditación espiritual, mostrando las vivencias de la persona en el momento que lo realiza. Mayoritariamente las mandalas suelen crearse en arena o en tela y sus colores tienen grandes significados.
En lo espiritual:
El mandala conecta desde el punto de vista espiritual con lo divino y el alma a través de las formas y los colores.
En la geometría sagrada y la naturaleza:
Los mandalas están muy presentes en nuestro día a día. Si pensamos un momento nos podremos dar cuenta que existen multitud de elementos en nuestra vida que siguen una ordenación inteligente en su composición. Ejemplos de ellos son los copos de nieve, las flores, las espirales de las galaxias, las colmenas, las figuras geométricas (círculo, espiral, cubo, tetraedro, …) o las que aparecen cuando se corta por la mitad una granada, un kiwi, …
Los dibujos realizados se interpretan como un centro principal de energía del que van surgiendo diferentes vertientes que establecen un equilibrio en nuestro cuerpo y mente. Un punto principal del que pueden surgir infinitas vertientes de posibilidades a través de sus formas y sus colores.
En las manualidades y el arte:
Se utiliza como una atractivo modo de decoración basado en formas y colores. Pintar y colorear los mandalas es un proceso que invita a pensar, tranquilizarse y divertirse.
El arte de dibujar mandalas o colorearlas no es sólo una actividad específica para niños sino que los adultos cada vez lo solicitan y lo realizan con más frecuencia.
En psicología:
Se utiliza como terapia de relajación antiestrés y como método de lectura del estado de ánimo de la persona que lo realiza. Un mandala muestra mucha información de nosotros mismos, en el apartado “Mandalas y sus significados” podrás encontrar más detalles de dichos significados a través de sus formas y sus colores.
Recuerda que para realizar los mandalas no hay reglas ni restricciones, lo mejor es dar rienda suelta a la mente para poder expresar en tu mandala el momento en el que estás.
En el zodiaco:
Dando una vuelta por internet hemos visto una interesante página en el blog “The Fausto Rocks Yeah”. En ella se puede encontrar una serie de correspondencias entre las mandalas y los 12 símbolos del zodiaco a través de diferentes elementos con orígenes arquitectónicos, culturales y simbólico de distintas culturas. Os invitamos a que accedáis a ese curioso artículo.
Mandalas y sus significados:
Crear o dibujar mandalas es una excelente terapia que cada día está más extendida. Su modo de creación reflejará distintos significados dependiendo de sus formas y de sus colores.
Significado de las formas en mandalas:
Dependiendo de la forma del mandala (círculo, espiral, …) se refleja el estado de la persona del siguiente modo:
Círculo: refleja seguridad, aunque a su vez lejanía.
Cuadrado: equilibrio y armonía.
Triángulo: vida, cambios y transformaciones.
Corazón: amor y felicidad.
Espiral: energías y salud.
Laberinto: confusión, pensamiento y búsqueda de la estabilidad.
Estrella: Espíritu, alma y liberta.
Los colores combinados con las formas muestran principalmente el estado de anímo y los sentimientos de la persona que los realiza.
Blanco: relacionado con lo puro, la luz, la perfección, lo pulcro y si se usa en muchas áreas del mandala también muestra desconocimiento de algunos puntos de nosotros mismos.
Negro: relacionado con la muerte, la tristeza, el miedo y la preocupación.
Gris: lo neutro, la estabilidad y la inteligencia.
Verde: la naturaleza, la esperanza, la vida y la libertad.
Azul: la tranquilidad, la armonía, la alegría.
Rojo: la sangre y lo vital, la energía, la pasión y el amor.
Naranja: refleja energía, el movimiento y la valentía.
Amarillo: el día, la luz y el sol.
Rosa: la paciencia, el altruismo, dulzura.
Morado: sabiduría, los ideales y el cariño.
Violeta: lo mágico y espiritual.
Plateado: lo femenino las emociones, los aspectos sensibles y la mente.
Dorado: riqueza, divinidad, lujo además de la sabiduría.
Os mostramos algunos ejemplos de mandalas realizados en piedra por nosotros:
Aparte de dejar que nuestra mente muestre sus actuales pensamientos y sentimientos, podemos incitar estados de ánimo específicos en nosotros mismos creando un mandala eligiendo de primeras los colores a aplicar según su significado. Veamos algunos ejemplos:
Si queremos tranquilizarnos y relajarnos usemos los azules en nuestra mandala, esto nos generará un estado de equilibrio mental con nuestro entorno.
Crear mandalas con mayoría de colores verdes nos ayudará a sanar nuestro cuerpo y mente.
Un mandala creado con mayoría de colores rojos y naranjas nos activará y nos dará vitalidad.
Usar el color amarillo de forma abundante nos invitará a pensar y reflexionar sobre nosotros mismos.
Utiliza el color violeta en tu mandala para promover un cambio y como protección a energías negativas.
Mandalas y sus beneficios:
Como estamos viendo la creación de mandalas tiene unos beneficios especiales. Os los mostramos:
Beneficios físicos del mandala
Nos hace sentir más felices ya que aumenta la serotonina en nuestro cuerpo.
Relaja nuestros músculos.
Ayuda a mejorar nuestro sistema inmunológico.
Nos ayuda a regular nuestro ritmo respiratorio con lo que aumenta nuestra vitalidad física.
Mejora el riego sanguíneo.
Regula nuestra presión arterial.
Beneficios espirituales del mandala
Nos tranquiliza para lograr un equilibrio entre nuestro espíritu, cuerpo y mente, armonizando la relación entre ellos.
Aumenta nuestra creatividad imaginativa y espiritual.
Beneficios psicológicos del mandala
Relaja nuestra mente reduciendo el estrés y la ansiedad.
Reduce la tristeza y la depresión.
Incrementa nuestra propia confianza y fortalece la autoestima.
Ayuda a expresarnos más fácilmente.
Mejora la capacidad de concentración y de atención.
Esperamos que te haya gustado esta pequeña introducción a los mandalas y que puedas inspirarte, aumentar tu tranquilidad y bienestar con estos especiales elementos.
Próximamente te enseñaremos como realizar estas bonitas obras de arte con mandalas y piedras pintadas. Estate atenta a nuestro blog en PiedraCreativa.
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Fuente: este post proviene de PiedraCreativa_manualidades, donde puedes consultar el contenido original.
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