Pintura a la tiza para muebles: características
La pintura a la tiza cubre bien con pocas capas.
Tiempo de secado rápido.
Es una pintura al agua, por lo que no consigue un acabado impermeable.
Limpieza con agua.
No huele.
Consigue un acabado mate, muy usado para dar un toque vintage.
Se adhiere a la mayoría de las superficies.
Hasta aquí, todo son bondades pero a continuación os detallo que no todo es como se publicita.
Pintura a la tiza inconvenientes
Como sabéis, soy muy partidaria de usar pintura a la tiza, la encontraréis en multitud de mis proyectos y manualidades. Y, aunque es mi opción principal cuando busco pintar un mueble, en algunas situaciones no es la mejor alternativa, o simplemente, se le ha dado una publicidad errónea que puede generaros alguna decepción.Todos hemos oído que la pintura a la tiza no requiere de preparación previa y se adhiere a cualquier superficie, pero no es del todo cierto si lo que buscamos son resultados duraderos.
Por estas razones he querido resumiros en este post, todo lo que hay que tener en cuenta cuando pintemos con chalk paint.
La pintura a la tiza puede necesitar preparación previa
Si algo publicita la pintura a la tiza es que no requiere preparación previa de la superficie, pero esto no quiere decir que tengamos un buen resultado.Si pintamos sobre una madera virgen, la preparación que necesitamos es nula, como en el caso de esta chimenea decorativa,
Pero la mayoría de las veces, las superficies sobre las que trabajamos están ya tratadas, pintadas, barnizadas o están en mal estado.
En estos casos debemos valorar limpiar bien la superficie, eliminando restos de suciedad o grasas, lijar bien o directamente, retirar esas capas de pinturas o barnices antes de aplicar la pintura como en esta cómoda.
La pintura a la tiza requiere un acabado protector
Esta pintura tiene un acabado blando, es decir, poco resistente a los arañazos, a las manchas, al agua y a los productos de limpieza.Es imprescindible que le demos un acabado protector posterior que puede ir desde una cera para madera, lacas de acabado o barnices.
El sangrado
Cuando queremos pintar maderas oscuras, teñidas o barnizadas con una pintura de color claro como puede ser un blanco antiguo debemos tener precauciones.Este tipo de cambios de aspecto es muy utilizado, al ser muy frecuente el querer renovar un mueble antiguo de color oscuro, algo muy habitual en los hogares.
Al aplicar la pintura a la tiza formamos una capa porosa, es decir, no sellamos el poro, y en maderas oscuras, barnizadas o teñidas en tonos oscuros con base aceite, éstos, con el tiempo, van a migrar hacia las capas de pintura.
El resultado son manchas que tiñen la pintura de colores amarillentos o rosados.
Para evitarlo, conviene que en estos casos, usemos siempre una imprimación antes de pintar. Más vale prevenir que curar.
Pintar sobre cristal o metal
Aunque la pintura a la tiza se adhiere bien a la mayoría de superficies, en algunas extremadamente lisas es más difícil que la pintura agarre. Puede que lo haga en un primer momento pero será una capa más frágil.El resultado es una pintura que puede saltar al descascarillarse sobre la superficie. No es algo que aparezca desde el primer momento pero puede hacer que el resultado no sea tan duradero como esperamos ni tan resistente a los golpes.
Cuando trabajamos con superficies no porosas como el cristal o el metal, lo más seguro es aplicar una imprimación antes de pintar.
Si no es posible, por lo menos usaremos pintura a la tiza en spray, que crea capas más finas y respetar el secado entre ellas hasta conseguir el acabado deseado.
La pintura a la tiza no es impermeable
Como la pintura a la tiza es una pintura al agua y además crea una capa porosa, no tiene un acabado impermeable y es muy fácil que la humedad la dañe.Es por eso que no podremos limpiar la superficie con un paño húmedo porque debilitaríamos el color y la integridad de la pintura.
Lo ideal es evitar que la usemos en muebles de exterior o en zonas de la casa húmedas, como el baño o la cocina y elegir una pintura para exterior impermeabilizante o pinturas para baños y cocinas.
Si aun así queremos usarla, porque el color nos convence o porque no queremos invertir en otra pintura, debemos usar un protector de pintura que nos proteja.
A pesar de todo esto que os cuento, la pintura a la tiza sigue siendo mi favorita para los muebles de casa. Su cubrición, su base al agua, el acabado mate y la posibilidad de mezclar pinturas chalk paint para obtener nuevos tonos es algo que valoro a la hora de decorar mis muebles.
Como en todos los casos, hay inconvenientes pero su facilidad de uso y limpieza las hace ideales para trabajar en casa.