Ese momento es una faena o... lo podemos ver como el punto de partida de una interesante manualidad!, así que... Yuhuuuuuu seguimos reciclando hueveras, ya os avisé la semana pasada que seguiríamos haciendo cosas con este material que es súper agradecido para cortar, pintar, no pesa nada...
Hoy vamos a usar una de esas pequeñitas que no suele haber en las casa de familias numerosas... ;) pero que cuando aparece una, por supuesto guardo como un tesoro.
La vamos a convertir en una caja para esconder un regalo, un envoltorio, mejor dicho....os adelanto que este va a ser el escondite del premio del cuarto sorteo!!
Hay mil opciones para decorarla y darle una segunda y colorida vida a nuestra huevera, yo he elegido la combinación de gris, rojo, blanco que me parece muy alegre.
Os voy a ir dejando una secuencia de fotos para que veáis el proceso. Antes de empezar os daré un consejo: no diluyáis la pintura, es mejor que esté más gordita para que cubra bien y además, si le añadís agua, ésta hará que el cartón de la huevera se reblandezca y no nos interesa!
Una vez que ya tenemos la huevera completamente pintada, vamos a buscar un papel que nos guste y algún cordón que creamos que remata nuestro conjunto
Pegamos un trozo de papel sólo en la parte de arriba, en la tapa, nos resultará más fácil.
Ahora elegimos un cordón, lazo, rafia...Tenía varios que creía que podían querer bien, pero....como la cabra tira al monte.... Jejeje... el que más me gusta es ... la cuerda rústica
Después, para darle un toque distinto, le añadimos un trocito de puntilla o de otro material que nos parezca que resalta nuestra "caja" y la hace "especial".
No me digáis que no es una forma curiosa, divertida, original y apañadita de envolver un montón de detalles, también como cajita de dulces para regalar galletas, bombones...
¿Qué os parece, a que vais a pensar 2 veces antes de tirar una huevera?, pues.... Misión cumplida!!