Entre proyecto y proyecto, trabajo y trabajo, me relajo haciendo hexágonos.
Cuando no estoy inspirada, saco mi cajita de hexágonos y disfruto haciéndolos.
Lo de unirlos me resulta un poco más lento pero también me gusta ver como va creciendo mi manta de sofá.
A veces toca deshacer porque he puesto alguno repetido, o que no me acaba de convencer, pero tampoco me importa, ya estoy acostumbrada.
Deshacer sin enfadarnos, es una de las cosas que primero hay que aprender.
Es igual que ir modificando nuestra vida con las cartas que nos van dando.
Que filosófica me he levantado esta mañana!!!
Y sigo coso que te coso...