Para no alargar tanto esta entrada, voy a contar por separado estos dos encuentros.
En la Font este año había menos participación debido a que se realizaban varios encuentros en diferentes poblaciones y las encajeras siempre tenemos algún compromiso o algún pueblo donde tenemos preferencia bien por amistad, por cercanía o por gusto.
Esto es lo que nos pasa a nosotros con la Font de la Figuera. Vamos desde el primer encuentro y las personas tanto de la organización como del pueblo son tan simpáticas y nos tratan tan bien que no nos lo perdemos, es mas, reservamos ese día evitando comidas familiares, viajes y demás.
Si el primer encuentro nos pareció estupendo a pesar del sol que nos hizo en la plaza donde se celebro, ahora que se celebra en una calle donde predomina la sombra y que cubren con toldos por si acaso no os quiero ni contar lo bien que estamos.
Las que me conocéis ya sabéis que para los nombres soy un verdadero desastre y por ello os pido perdón, por este motivo y como no quiero dejar sin nombrar a ninguna de las personas que participan en la organización y que tanto se esfuerzan para hacernos pasar un día perfecto, me refiero a la "organización" englobándolas a todas. Eso si, me permitiréis hacer una excepción con Ana Muñoz monitora de encaje de bolillos, organizadora y una bellisima persona con la que siempre da gusto hablar; con Mario que es la persona que se encarga de avisar y coordinar a los participantes, y por supuesto Vicent que es el alcalde y cuya simpatía y amabilidad es notoria. Además tiene una paciencia increíble con nosotras y mas de una vez le hemos hecho subir lo colores diciéndole lo guapo que es. Y seguro que coincidís conmigo en este punto, y como siempre va sonriendo pues todavía mas guapo.
Tengo que confesaros que algunas veces comentamos el primer encuentro en referencia a Vicent. Por supuesto no lo conocíamos ni imaginamos que era el alcalde, ¿por qué? Muy sencillo. Cuando empezó el encuentro en la plaza como os he comentado estaba con su chaqueta, todo arreglado, como decimos por aquí. Pero a medida que transcurría la mañana lo vimos sin chaqueta, la camisa subida hasta los codos, poniendo las sombrillas para resguardarnos un poco del sol de justicia que hacia, sirviendo la comida en las mesas, entregando los premios... total que hizo de todo para que nos sintiéramos cómodas, a pesar de que hay cosas como el clima que no se pueden prever. Desde ese primer encuentro y viendo sus esfuerzos nos ha parecido un "político" de los que vale la pena aplaudir y eso en nuestros días es mucho.
Además de saludar y conversar con las anfitrionas (bolilleras de la Font) con las que tuvimos el gusto y placer de compartir mesa, pude conversar con Maria Jesús y sus chicas de Caudete que tienen unas manos...normal porque María Jesús que es su monitora, tiene una paciencia, imaginación y saber hacer y transmitir que es imposible no amar el encaje de bolillos oyéndola hablar. Por supuesto, me comento algunos truquitos y formas de hacer algunos puntos que estoy deseando poner en practica.
Hable con creo que todas las participantes y por supuesto con los puestos conocidos. Algunas amigas no pudieron participar en el encuentro por motivos de salud y desde aquí les mando un abrazo y mis deseos de una pronta recuperación.
Como este año eramos pocas encajeras, tuvieron el detalle de avisar desde la organización a los dueños de puestos para avisarles por si les interesaba o no ir. Esto me parece un detalle que aunque debería ser lo normal es digno de agradecer. ¿Por qué? Pues porque la mayoría de los puestos vienen de sitios con bastantes kilómetros de distancia y llegar a los encuentros les supone un esfuerzo tanto económico como físico porque aunque el encuentro empiece a las 10 h de la mañana, ellos empiezan a montar antes de las 7 h de la mañana después del viaje de horas. Y hacer ese esfuerzo para que sean mas puestos casi que encajeras como pasa en algunas localidades, pues la verdad a mi me parece muy mal, y eso que soy de las que siempre compran algo.
A pesar de conocer a la mayoría de los puestos no se sus nombres así que pido disculpas pero no los puedo nombrar. La excepción es Paco Juan y Mª Jose que los conozco tanto, incluso alguna vez he ido a su casa, y hablo tanto con ellos en cada encuentro...en esta ocasión Mª José me explico como hace ella un punto que tengo que probar y por supuesto enseñaros, además le compre algunos patrones de Roka que me encantaron por ser diferentes.
Para seros sinceras me gusta tanto ir a los encuentros porque me alegra muchísimo pensar que tengo tantas amigas y conocidas con las que disfruto comentando y me hace sentirme feliz y cargada de energía positiva.
Visitamos la bodega Arraéz, tradición para nosotras, que desde la última vez que la visitamos han realizado obras para crear una zona de degustación con cita previa que incluye comida si se desea, y que por supuesto nosotras ya tenemos pensado experimentar.
A las 11 h el grupo de danzas nos deleito con unos bailes y música de acompañamiento.
En esta ocasión yo no visite ni el museo ni la iglesia como los años anteriores porque me quede charlando con las amigas de Caudete.
La comida transcurrió en armonía y tengo que decir que sigue sorprendiéndome como consiguen hacer paellas para tanta gente y que les queden tan sabrosas. Mis felicitaciones al restaurante que proporciona la comida para el encuentro y que cuenta además con unos camareros/as muy amables y simpáticos.
Y después de la comida, llega el momento del sorteo. Por supuesto a mi no me toco nada a pesar de haber un montón de regalos donados por diferentes tiendas y puestos del encuentro. Me alegro sin embargo, que dos de mis amigas si tuvieran suerte. En concreto una de ellas de los 4 encuentros que se han realizado le ha tocado premio en tres. Un buen porcentaje de suerte. Además, y para consolarme, a una de mis amigas le toco hilos a los que tenía yo muchas ganas de echarles mano para satisfacer mi curiosidad, y como mi amiga me dio alguno, pues también me toco algo.
Las que me conocéis ya os imaginareis que la falta de premio no evito que montáramos una buena juerga, nos riéramos y disfrutáramos como niñas.
Acabado el sorteo y el café llego la hora de despedirse prometiendo volver al próximo y quedando para vernos en próximos encuentros de otras localidades, porque no vamos a esperar un año para volver a charlar con las amigas encajeras de otras localidades.
A continuación os dejo un resumen con las fotografías que realice, que con tanto hablar no fueron muchas la verdad. Podéis ver mas fotografías tanto en el perfil de facebook de Ana Muñoz como del Ayuntamiento de la Font de la Figuera.
Eso si, no me busquéis en las fotografías porque ni toque la labor ni me senté a excepción de la hora de la comida.
Un encuentro o reunión de encajeras pequeño pero familiar y con muy buen ambiente.
El año que viene repetimos.