En el trabajo de oficina surgen necesidades de encuadernación con bastante frecuencia. Podemos solucionar esta tarea de forma eficiente con la adquisición de una encuadernadora. Existen diferentes opciones de encuadernadoras que nos permiten tener bien presentadas las publicaciones, organizadas y ordenadas.
Hay diferentes tipos de encuadernadora, todas válidas, la mayoría son de la marca Fellowes o GBC. En primer lugar hay que analizar cuál nos interesa más según el número de usos que se le quiera dar. Por lo general son todas fáciles de usar, pero hay que tener en cuenta si el uso va a ser ocasional o será para un usuario profesional.
Empezando a analizar los tipos de encuadernadora, la encuadernadora de canutillos es posiblemente de las más utilizadas, siendo además la más barata, con un buen acabado de canutillo de plástico, que tiene un inconveniente: no permite que las páginas giren los 360 grados y eso, dificulta la lectura parcialmente, pero sobre todo si se quiere hacer fotocopias del documento una vez encuadernado. Esta encuadernadora está muy indicada para encuadernación de dossieres, pero puede hacer que se rompan las hojas con más frecuencia. Las encuadernadoras de canutillo de plástico se accionan con una palanca ergonómica que perfora las páginas e introducen el canutillo, pero también las hay eléctricas.
En cuanto al giro de las hoja en 360 grados, es un problema que no encontramos con las encuadernadoras de espirales. Hablamos de la popular espiral metálica cuya encuadernadora es la más demandada por su comodidad y resistencia. Como en el anterior caso, la encuadernadora realiza los agujeros introduciendo el borde de las páginas y accionando una palanca. En función de la capacidad y las características de la encuadernadora, podrá perforar más o menos hojas al mismo tiempo. La espiral se introduce girando el alambre y se cierra en sus extremos con la ayuda de unos alicates. No obstante, también existen encuadernadoras con un insertador eléctrico que permite la introducción de la espiral, lo que reduce el tiempo que necesita cada trabajo. El precio de los modelos más básicos es muy similar al de las encuadernadoras de canutillo plástico.
Encuadernadora Térmica GBC T400
Las encuadernadoras de espiral y canutillo son las más extendidas, pero hay muchas más opciones de encuadernación, por ejemplo la encuadernación térmica. Posiblemente sea uno de los sistemas que deja un mejor acabado y es muy popular en empresas con un alto volumen de trabajo de encuadernación. Su principal desventaja es que una vez encuadernado el documento no se puede modificar. Entre las ventajas, además del acabado, es que puede permitir encuadernar varios documentos a la vez y su proceso es completamente automático. Se introducen las páginas en una ranura, se selecciona la función y la encuadernadora hace el trabajo. Aunque trabaja mediante alta temperatura, cuenta con sistemas de seguridad evitando que el usuario tenga que tocar la placa térmica. Por precio, existen modelos que tampoco encarecen en exceso la inversión de los sistemas anteriores.
A medio camino entre la encuadernación en espiral y de canutillo está la encuadernación wiro, consistente en una doble anilla similar a la que tienen muchos cuadernos. Su uso es más complicado, pero puede ser una opción para encuadernados ocasionales, con la posibilidad de girar las páginas 360 grados, aunque se desgasta más porque las anillas pueden tender a abrirse con el paso de las páginas. Las encuadernadoras de canutillo Wiro tienen un precio algo más elevado.
Otras posibilidades son las aportadas por la encuadernación channel, la más rápida porque funciona sin perforado ni calor, sino con un adhesivo lateral que se fija por presión. Sin embargo, es el sistema más caro, tanto por la encuadernadora como por las tapas. También existen modelos de encuadernadoras mixtas que permiten el trabajo tanto con espiral metálico como con canutillo de plástico, incluso encuadernadora multifunción que también introduce el sistema wire con perforación eléctrica.
Otro aspecto muy importante a tener en cuenta a la hora de elegir una encuadernadora son las tapas o portadas de encuadernación. Estas pueden ser transparentes o de color. Se adquieren normalmente en packs de 25 o 100 unidades y los materiales más extendidos son PVC, polipropileno reciclado y cartón. En el caso de la encuadernación térmica, se utiliza una versión específica con el lomo en diferentes colores, suelen conocerse como carteras térmicas. Otro elemento añadido son, tanto los canutillos como las espirales, que también se adquieren en packs y teniendo siempre en cuenta el grosor de los documentos a encuadernar, ya que se fabrican con diferente diámetro medido en milímetros.
En definitiva, existen una gran variedad de alternativas para la encuadernación y numerosos modelos. Solo hay que definir y planificar bien cuales son nuestras necesidades para acertar en la compra de la mejor encuadernadora posible.
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