En el DIY os traigo hoy, le daremos una segunda oportunidad a un bolso para convertirlo en nuestro básico para este verano.
Y es que, llegó el buen tiempo, los días más largos, las terracitas, las escapadas y hasta los temidos cambios de armario. Menos mal, que este cambio de armario es mi preferido. Me encanta el calorcito, la ropa es más ligera, más cómoda y por el bien de nuestro estado de ánimo, también más colorida. Y en ello estaba, cuando me encontré con un bolso de rafia así “al desnudo” al que un lavado de cara le iba a venir estupendamente.
Os cuento cómo lo he convertido en un bolso veraniego de lo más alegre.
Materiales
Bolso
Cintas
Bolitas de lana
Pistola de pegamento
Paso a paso
Si ya tenemos nuestro bolso, sólo nos falta preparar los adornos. Estas cintas que veis, las compré en mercería y las bolitas de lana en Sostrene Grene.
En mi caso he querido conservar el color natural del bolso pero si os apetece, podéis usar pintura a la tiza para darle algo de color.
Decorar el bolso es muy sencillo con la pistola de silicona. Seca muy rápido por lo que todo el proceso os llevará minutos.
Colocad los adornos a vuestro gusto y ya tenéis el bolso preparado para salir a lucirlo.
¿Os animáis a probar?
¡Hasta el próximo DIY!