A que vos como tantas mujeres vivís a full día tras día e intentás hacer lo mejor posible para cumplir con todo, pero en el fondo hay cosas que te gustaría hacer ahora pero las vas dejando para después... y después... y después... hasta que llegan a formar parte de la "Lista de los Después" que vas hacer cuando tengas más tiempo, o sea cuando estés de vacaciones, pero resulta que tus vacaciones sólo tienen 30 días, si tenés esa suerte, tu "Lista de los Después" parece extenderse como un pergamino de los que anunciaban las nuevas buenas del rey; entonces con la mejor de las predisposiciones empezás a distribuir esas tareas en los 30 días que ocupan tus vacaciones, genial todo organizado y sincronizado pero... la familia quiere salir de vacaciones, bueno bien merecidas las tienen y vos también.
La pasás genial, la cordillera te carga las pilas y cuando volvés retomás tu "Lista de los Después", el detalle es que ahora disponés de menos tiempo pero te reusas a borrar algunos Después, así que volvés a redistribuirlos.
Tan sólo tenés 20 días, ponés la mejor onda pero el clima no colabora, el calor te agobia, oscurecés la casa y tratás de pasar el día lo mejor posible, cuando baja el sol comenzás a trabajar super inspirada, ordenás, sacas cosas de acá, ponés otras por allá, pintás esto, renovás lo otro y vas tachando tus Después hasta que derrepente.... te das cuenta que mañana empezás a trabajar, así que volvés a revisar tu "Lista de los Después" la lees y la relees, de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba, hasta que descubrís que realmente tu "Lista de los Después" no es tan larga sino que tus vacaciones son cortas.
Ahora bien, llegó el momento de mostrarte una de las tantas cosas que hice de mi "Lista de los Después", principalmente me enfoqué en organizar mi taller, lavadero, jardín de interior, sí lo sé, todo un desafío.
Comencé dandole una vuelta más a unos tarros de cartón de los que viene el dulce de leche repostero, estos tarros ya fueron decorados en su momento con motivos infantiles, para que mi hija guarde los juguetes de la cocinita, pero los chicos crecen y ya está atravesando su adolescencia, por lo que estos tarros volvieron al taller.
En primer lugar quite el decorado de cartón microcorrugado que tenían (lo guarde ya tengo pensado algo para ellos jj), y los lave bien con una esponjita para quitarles el polvo.
Luego los pinté con látex blanco,( aunque no me creas encontré un tarro que tenía 1cm de látex y me alcanzó para pintar cuatro tarros);
como estaba ansiosa no tenía ganas de pintarle un imágen así que opté por el decopage, imprimí unas láminas que elegí de mi tablero de Pinterest, las recorté y pegué con cola vinílica utilizando una pinceleleta suave.
Como el papel es grueso,no se integra muy bien así que pinté toda la superficie con té, sin arrastrar el pincel sólo dando golpesitos para que no quede rayado.
Una vez seco, barnice todo con barniz al agua natural; con esta técnica quedó una base de blanco antiguo integrandose de esta manera, perfectamente el decopage.
Dos de los tarros los destiné para guardar semillas y macetitas para cactus, los otros dos te lo cuento en otra entrada, así no te aburrís.
Espero que te hayan gustado como quedaron y te sirvan de inspiración, como ves no siempre necesitamos tener papeles especiales para realizar decopage con un poquito de pintura y tinte natural como el té podemos ir resolviendo nuestros Después.
Y vos ¿también tenés una "Lista de los Después"?
Hasta pronto
Cari