Hola a todos!!
Ya conocéis mi pasión por buscar (y encontrar) chatarra y tesoros varios, así que ¿qué pensaríais si os dijera que he encontrado una fuente ilimitada de madera de desecho? Síiii!! Iba conduciendo un día para comprar algo de espuma para retapizar mi taburete, y cambié la ruta para llegar al sitio. El aburrirme del mismo camino al mismo sitio no es algo nuevo en mi, podéis leer otra historia aquí sobre el asunto y cómo acabé encontrando algo inesperado por el camino…
Bueno, de nuevo al día que necesitaba mis provisiones. Mientras conducía se apoderó de mi un sentimiento de exploradora y pensé que podía llegar al almacén aunque cambiara el itinerario, así que me lancé. En mi defensa tengo que añadir que no era un simple centro comercial, era un polígono industrial enorme! Después de pasar por el mismo sitio tres veces admití para mi misma que estaba perdida. Incluso las niñas me decían: “mamá, creo que hemos visto esto antes”… Vale, no hay problema, no puede ser tan difícil salir cuando ha sido tan fácil entrar.
Decidí seguir sólo las avenidas anchas y que probablemente me llevarían a la autopista o a algún lugar que reconociera, y de pronto lo vi. ¡Era como una visión! ¡Un contenedor lleno de madera de desecho! Estaba justo fuera de una carpintería y allí tiraban todos los trozos que ya no necesitaban. Por suerte mi maletero ese día iba vacío y lo cargué con maderas de diferentes medidas y perfectamente cortadas.
Como viene siendo habitual, estaba tan emocionada por el acontecimiento que no me acordé de hacer fotos en aque momento, pero las maderas pequeñas eran así.
Cuando las hube cargado todas, entré en el coche y dibujé un pequeño mapa en un papel para saber volver otro día. Y la verdad que he visitado mi “tienda” favorita varias veces para hacer diferentes cosas con las maderas.
Lo primero que hice fueron estos cuadros para mi recién pintado pasillo. Me encanta cómo lucen en esa pared tan larga, y el proceso es realmente sencillo.
Busqué por el trastero un trozo de contrachapado que ya tenía y lo corté a la medida de un folio, y lo mismo dos veces más. Entonces le pegué unas láminas que tenía muy bonitas y les di barniz por encima. Si queréis podéis ver mi técnica de decoupage.
Finalmente, pegué las tres maderitas sobre las maderas de desecho, añadí detras unos cáncamos y los colgué, ¡así de simple!
El cuadro realmente está recto, pero mi pasillo es tan estrecho que no he podido hacer una foto decente.
Y como no pensé en hacer una foto de como se ven en la pared entera el día que los colgué, pues se la hice ayer. Sí, tenéis razón, mi pasillo necesita un repaso de pinturita por lo menos en las cuatro rayas de abajo… ¡hay mucho tráfico por aquí, sobre todo niños!
Este es el tipo de proyectos que más me gustan, ¡decoración low cost! ¿O debería decir decoración gratis?
Quizás os apetezca visitar algunos otros proyectos para el hogar también sin apenas coste, como la Chalk Paint casera para olvidarnos de lijar, unos jarrones reciclados muy cucos o cómo organizar nuestros abalorios de forma sencilla.
Y si lo que queréis ver es un diversidad de proyectos, los podéis ver aquí.
Que tengáis una semana estupenda!
Abrazos,
Pili
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