Últimamente me olvido de hacer foto del "antes" . Lo siento.
Encontré una cajita en el Barrio de las Letras de Madrid, en la acera y junto con un montón de cosas más, como platos de Ikea , vasos, jarras, todo sin estrenar y yo sin coche !qué rabia! Solo pude llevarme la pequeña cajita. Es de madera color pino y con unos "hoyuelos" que aproveché para lunares. No me apetecía rellenarlos de pasta y hacer cualquier otra cosa porque el tamaño de la caja no daba para muchas florituras.
El florero es de un material plateado mate, metálico, que yo digo que es de estaño pero que no tengo ni idea. Era bonito en su juventud pero ahora había tomado un color bastante feucho, así que estaba en el baul de los "porsiacas".
El fondo está pintado con gesso negro y encima pintura todo terreno blanca. En el caso del florero aplicada con esponja. Las manos creo que dos pero ya sabéis, las que necesite.
Entre los dos tonos aplicamos la vela, como siempre que queremos que asome el color base.
El florero solo pintura blanca y lo acabé con barniz porcelánico. Me apetecía un poco de brillito para que asemejara a la cerámica.
Estas ramas y las rosas enanas me gusta cortarlas, dejarlas secar y ponerlas donde primero se me ocurre.
Como veis, la decoración es decoupage con esta servilleta de flores que a mi me parece preciosa.
Como la caja estaba un poco "perjudicada" le apliqué aguaplast, un poco de cualquier manera, para que quedara más viejita.
Por último una caja de cartón, que no me gustó mucho cómo quedo pero que tampoco la tengo muy a la vista, así que no volví a retocarla.
Un besazo y gracias por vuestras visitas.
Fuente: este post proviene de Blog de quintanar, donde puedes consultar el contenido original.
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