Al llegar a esta casa me encontré con muchas cosas viejas que necesitaban restauración, en el recibidor, sin ir más lejos, estaba una cajita de madera pintada desde hace siglos... no tengo fotos del ANTES pero tenéis que creerme cuando os digo que era un verdadero espanto. A pesar de todo es muy útil para mi, tiene muchos ganchitos y así puedo tener todas las llaves bien ordenadas y no perder ninguna.
Aunque la mía es viejísima he encontrado un modelo parecido en una web por si os interesa este tipo de soluciones, aquí lo podéis ver.
Lo primero que hice fue darle un par de manos de chalk paint de la marca AUTENTICO de color blanco antiguo, esta marca y este color me han salvado la vida este verano, creo que es la mejor de las chalk paints que he probado. Además de esto, los materiales que utilicé fueron los siguientes:
Encontré esta servilleta de papel con estampado floral en Søstrene Grene (amo esta tienda, la echo de menos desde que vivo fuera de Madrid) y pensé que quedaría muy mona utilizándola sobre la caja haciendo la técnica de decoupage, lo único que hay que hacer es quitarle las demás capitas de papel a la servilleta y quedarnos solo con la decorada.
Y ahora con mucho cuidado porque el papel es muuuuy finito empezamos a recortar los motivos que nos gusten, yo no quise recortar del todo y dejé un poco de fondo así que cuanto más se parezca el fondo al color de fondo de vuestra cajita mejor que mejor.
Ahora poco a poco vamos pegando los trocitos con una mezcla de agua y cola blanca, mucho cuidado que se arruga bastante aunque el efecto arrugado también es bonito.
Y así fue como quedó la cajita de las llaves del recibidor de casa, algo muy simple y que le da una nueva oportunidad a un mueblito que ya estaba muy feo.
¿Os gusta? ¡Espero que sí!
¡Hasta pronto!
Fuente: este post proviene de La Condesa Patitiesa, donde puedes consultar el contenido original.
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