No sabéis la cantidad de vueltas que ha dado este cuadro.
Surgió de una tarde de invierno. De un dibujo a lápiz que se hizo grande y que me daba pena que no tuviera un lugar en el mundo. Es rara la sensación que tienes con los dibujos que realizas. Tienes una idea en la cabeza, pero no sabes cómo va a ser realmente el resultado final.
El caso es que estoy contenta con el resultado final, pero ha acabado en un cajón esperando a ser regalado. Todo lo que hago, lo regalo. Siempre pienso que tengo la fábrica.He ido muy poco a poco. Me he tomado mi tiempo, he probado cosas, texturas, me he equivocado y he cambiado colores y formas.
Y si quereis ver el proceso completo ¿por qué no echar un ojo a nuestra cuenta de Tik Tok o instagram?
Ahora que he acabado esto y que no tengo nada pendiente. Voy a empezar con EL PROYECTO. A ver qué sale de esto.
Y a ti ¿Qué te parece este pequeño cuadro?
Y tú ¿tienes cositas pendientes que acaban siendo otra cosa?
Esperamos todos vuestros comentarios y...
¡nos vemos en la siguiente entrada!