En la Edad Media a las brujas se las perseguía, se las torturaba y se las quemaba sin piedad en las hogueras, aunque también existían los que iban en busca de ellas por su buen saber hacer para solucionar sus problemas, incluso alguno de ellos eran de los que asistían a las torturas... ellas con sus pócimas, sus recetas milenarias, la mayoría recopilada de antiguos druidas, sus hechizos, sus runas, cábalas y demás, resolvían muchas de sus contrariedades...
La imagen que a todo el mundo le viene a la cabeza cuando se habla de brujas es esa bruja vieja, fea y desdentada, de nariz ganchuda y con una gran verruga sobre ella, con ropajes negros hasta los pies, escenificada además con un sombrero alto y puntiagudo que remueve con una sonrisa maléfica un cucharón dentro de una marmita, y que además se pasea por el cielo volando en su escoba acompañada de un gato negro...
La brujería practicada por esas brujas de la Edad Media, fue en gran medida a causa de la miseria del pueblo, las diferencias sociales, las enfermedades, el hambre y todo lo que nadie podía remediar... Con todo ello, también nacieron las supersticiones y entre ellas estaba el temor a las brujas, mejor dicho a su poder, a las cuales se les culpaba de todos los males del mundo cuando no se hallaba ninguna explicación para ellos, y a alguien había que cargarle el muerto mientas los nobles y el clero campaban a sus anchas...
¿Quién en un momento de su vida no ha pensado en las predicciones zodiacales, el tarot, los caracoles o cualquier otro instrumento que predice el futuro, te habla de tu pasado y muestra el presente?
Muchos que buscan respuestas en estos métodos dicen que llegaron a ellos movidos por la curiosidad, que no creen en su resultado y exhiben cuantos pretextos se puedan hallar, lo cierto es que en algún momento la desesperación es tal que acudimos a los entendidos en estos artes para preguntarles: ¿Me ama?, ¿Me engañan? ¿Encontraré trabajo?... o para encontrar una pócima con el fin de retener el amor de alguien o quitar el mal de ojo, escribir en la planta de los pies el nombre de la persona a quien queremos pisotear, bañarse en canela para traer el amor, introducir una foto envuelta en un trapo negro y meterla en el congelador para que se aleje de nosotros, mezclar miel, canela y un papel con su nombre, revolver y nombrarlo una y otra vez para hacer que vuelva y quien sabe cuantas cosas más... los hay escépticos pero empiezan a confiar cuando la desesperación y el desasosiego les corroe...
Por la defensa de esas mujeres, por mi creencia en que existe algo más y por otras causas que ahora no contaré, decidí un buen día elegir una bruja como mi imagen y avatar... al igual que mi apodo que también tiene su historia...
Las brujas tenían sus grandes libros donde guardaban sus secretos... las brujas modernas tenemos las herramientas que nos da el progreso y podemos mostrar nuestros secretos al mundo en un click... y aquí es donde voy a guardar todas esas cosillas que poco a poco voy haciendo...
Tiribuja