A pesar de todos los esfuerzos que hice, no hubo forma de sacarla adelante.
Pero...
la vida te da sorpresas...
sorpresas te da la vida...
y una mañana de sábado cuando iba caminando hacia la feria de productos naturales: la ví...
La ví a ella, tan joven, así como está en esta foto...
Sin respaldo y llena de pintura sobre una montaña de escombros.
Me sonrió, a pesar de todo.
me hizo señas y me la traje...
La estudié seriamente y muy rápido decidí cuáles eran los materiales para comenzar a recuperarla:
Muy despacio le pasé con pincel el removedor de pintura y luego con la espátula fui sacando todos los indeseables...
Una vez que le quité lo más grueso seguí con el proceso de lijado (sin foto)
:(
Unos días después comencé a prepararla para la pintura con estos materiales:
El Cetol es como un barniz sin brillo con algo de color que impermeabiliza las superficies.
El esmalte sintético lo utilicé para los detalles.
Para eso le marqué las patas para pintarlas mitad y mitad .
Hasta aquí la primera parte de la recuperación de esta joven silla.
L@s espero en unos días para ver el final.
Gracias por leerme.
María.