Eso quiere decir que tengo más tiempo para hacer lo que me gusta, como publicar la parte final de la recuperación de la silla.
¿¿Recuerdan que no tenía respaldo???
Para resolver ese pequeño inconveniente, corté dos listones de madera de la medida adecuada a la silla, los lijé y los pinté de color rojo.
Le dí 2 manos de pintura y varias lijadas.
Una vez secos había que perforarlos y atornillarlos.
Entonces compré:
4 tornillos largos para atravesar el listón de madera que hace de respaldo y la silla.
4 tuercas
4 tapas para la cabeza de los tornillos
Así quedó el respaldo.
Luego pensé en hacerle un dibujo al asiento..
Lo dibujé en la pc y traté de copiarlo en la madera...
(me quedó parecido no?)
Lo pinté con esmalte sintético negro, rojo y blanco.
Dejé secar y saqué fotos.
Así me quedó la silla recuperada de la calle.
La encontré arriba de un montón de escombros, nadie la quería, la habían despreciado.
Hoy luce brillante en mi living y se destaca por sobre otros muebles gracias al color rojo intenso que la viste.
Gracias por visitarme.
Buena semana.
María