Yo quería quedarme con la lana. No me valía, como aparece tantas veces por Pinterest, hacerme una falda o un gorro, cortando y cosiendo con la máquina. Es lana gratis: qué más podía pedir. Así que me puse a recuperar la lana de jerseys viejos, que resulta que estaban en mejor estado del que esperaba.
Un tiempo después, he descubierto que hay dos tipos de jerseys: los que se pueden deshacer y los que no. Dependiendo de las costuras que tengan, deshacerlos es un proceso lento o es un proceso imposible.
Así que voy a enseñar estos dos tipos de jerseys, y dar un par de recomendaciones, por si alguien se encuentra un jersey barato y piensa en aprovecharlo por la lana (a mí me pasa constantemente), pero no sabe si podrá deshacerlo o no.
Los jerseys que se pueden deshacer tienen sus piezas cosidas con una hebra de su misma lana. Identificarla no es fácil, muchas veces hay que recurrir a la paciencia o la intuición, porque, como es exactamente igual que el resto de la lana de la que está hecho el jersey, se confunde fácilmente.
En esta foto, con el jersey del derecho, se puede intuir. Sobre la parte rosa aparecen pequeñas puntadas en rojo. Si todo el jersey fuese del mismo color, no podríamos verla.
Con el jersey dado la vuelta, la costura se ve mejor. Aquí, en la costura del hombro, se ve cómo hay una hebra roja uniendo las dos piezas:
Se dice fácil, pero no lo es. Lo malo es que como es muy difícil de localizar, lo normal es que cortemos la hebra que no es, partamos la lana y nos queden cachos pequeños que tendremos que unir con nudos al ovillo principal (o no, yo suelo tirarlos directamente). También es probable que la lana esté rota por el medio, y que, sobre todo en las mangas por la parte de las axilas y los puños, esté tan desgastada que se rompa o que sea inservible. Personalmente, las coronas de las mangas (la parte redondeada del exterior que sube hasta el hombro) me suelen resultar difíciles de deshacer, corto por donde no tengo, y termino con un montón de hebras pequeñas e hilitos que no me sirven de nada.
Aún así, un jersey da mucha lana. No tengo miedo a estropear una poca, ni a tirar la que no está en buenas condiciones, como los tramos de ovillo en los que hay que anudar cuando se rompen o la que está tan desgastada que se romperá al intentar volver a tejerla.
Tipo 2: jerseys que no se pueden deshacer
Por otro lado, tenemos los jerseys que no se pueden deshacer. De nuevo, nos fijamos en las costuras: si las piezas están cosidas con una overlock, lo más probable es que no se pueda deshacer. La costura con overlock se hace con hilos de coser, y la máquina, mientras va cosiendo, va cortando la tela que le sobra. La puntada que hace la overlock es la misma que lleva casi toda la ropa comprada en tienda.
Aquí una costura con overlock, en un lateral del jersey, dado la vuelta:
Sin embargo, el jersey no se queda sin reciclar. He estado probando cosas, he dado con algo que me gusta y os lo enseñaré pronto.
¿Soy la única que recicla jerseys? ¿Tenéis algún truco para hacer que el proceso de ovillar la lana sea un poco menos tedioso? Terminando doliéndome las manos, y seguro que hay una manera más eficiente de hacerlo.
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Fuente: este post proviene de Enemy Dolls, donde puedes consultar el contenido original.
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