QUÉ NECESITAS
- Chanclas
- Tijeras de cocina
- Alrededor de 1 metro de la tela que más te guste
- Pegamento caliente. (No es estrictamente necesario)
Empuja las correas de tus chanclas hasta que sobresalgan por el lado de la suela y córtalas con las tijeras de cocina para poder retirarlas.
Una vez retiradas las correas ya tendrás tus sandalias preparadas para decorarlas.
Corta la tela en 4 tiras iguales de 25cm de largo por unos 10cm de ancho. Necesitarás 2 tiras para cada pie.
Corta los extremos de las telas en punta.
Introduce dos tiras en el agujero superior de la sandalia y tira hasta que asomen por la suela.
Ata firmemente las telas con un doble nudo. El nudo quedará ajustado en el pequeño hueco donde se sostenían las cintas originales.
Corta las puntas del nudo para que quede lo más pequeño posible.
Da la vuelta a tus sandalias y realiza varios nudos con las dos telas. Estos van a ir entre los dedos. Mantén ambas tiras juntas para que queden igual de largas.
Pasa los dos extremos de las correas por los dos agujeros inferiores de la sandalia.
Ponte el zapato y aprieta bien la correa asegurándote de que te quedan bien ajustadas. Luego, realiza un nudo en cada extremo. Recuerda que la tela se puede dar un poco por lo que es importante que te queden bien apretadas.
Corta los extremos de la tela tal y como has hecho anteriormente y encaja el nudo en el hueco de la suela.
Si quieres reforzar tu sandalia, puedes aplicar pegamento caliente en los agujeros para que las tiras de tela queden bien sujetas.
¡Ya está! Ya tienes tus sandalias como nuevas para afrontar el calor del verano.
Fuente: http://blog.loikos.com/recicla-tus-sandalias-viejas-anadiendoles-color-y-personalidad/