Para ir a la moda.
Para tejer muñecos.
Para bufandas.
Para ir al campo.
Para los más pequeños.
Para las mascotas.
De los pies...
A la cabeza.
De todas las formas...
Y todos los colores.
Para este Enero tan frío y tan gris nada mejor que prendas de abrigo con color, hoy nos inspiramos con el punto (¿mal llamado?) jacquard.
Las palabras anglosajonas que lo denominan son stranded knit(ting) o stranded colorwork y que yo sepa no tiene una palabra que lo denomine en castellano. Puede que la más común sea punto jacquard aunque no la correcta ya que el jacquard es sólo una técnica del stranded knitting que en sus orígenes se usaba para tejidos en telar o maquina y se usa de forma genérica para cualquier tipo de tejido (telas, crochet...) con dibujo. Las dos técnicas más comunes del stranded knit son: intarsia, utilizada para grandes bloques del mismo color, y fair isle, se usa cuando el dibujo es más complejo.
Y luego encontramos variaciones según su procedencia, la lana con la que se teje, los motivos o dibujos, los colores... así nos encontramos por ejemplo con los lopapeysa o lopi de Islandia, tejidos con lana de sus ovejas y con el característico dibujo circular alrededor del cuello del jersey, los scandinavian de los países escandinavos... En cualquier caso las definiciones no son muy concretas y se entemezclan unas con otras.
Puedes ver una mini-muestra de jersey y gorro en punto jacquard en la entrada de mi muñeca esquiadora Rocío o puedes hacerte un gorro con mi tutorial de gorro con pompón. O si te apetece seguir viendo estas auténticas obras de arte en punto o tricot te invito a visitar mi tablero de jacquard en Pinterest.
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Fuente: este post proviene de Mientras cuchufleta duerme, donde puedes consultar el contenido original.
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