En esta ocasión hemos usado todo tipo de lanas de color rosa, pero podéis mezclar colores o elegir otras tonalidades.
La mecánica es muy sencilla, siempre y cuando sepamos realizar labores de ganchillo(en próximas entradas os iremos explicando las nociones básicas paso a paso).
Lo que debemos hacer es decidir qué de medida vamos a querer los cuadrados de la manta (pueden ser pequeños, medianos, grandes...) después, unirlos cosiéndolos en filas (tantos como ancha queremos la manta) y, finalmente, coser las filas (tantas como larga queremos la manta).
Nuestra manta es para el sofá, con lo que no tiene una medida muy extensa, pero suficiente para que, extendida, pueda colocarse a modo de cubrecama.
En total, hemos necesitado 80 cuadrados de unos 12 cm cada uno. Para unir las filas, una vez cosidos entre sí los cuadraditos, hemos hecho una pasada en punto bajo con lana de color negro para resaltar más cada uno de los diseños de los cuadrados individuales y facilitar también así la unión de las filas.
También hemos colocado un cuadrado en el centro dos veces más grande que el resto.
Queda muy bonito que los diseños de cada cuadrado sean distintos, es decir, que combinen distintos tonos y de manera diferente. Aunque también se puede realizar toda la labor siguiendo un mismo patrón de diseño.¡Esperamos que os haya gustado!
;)