Después de unas largas "vacaciones" y de tener a mi pobre blog parado, o lleno de fotos del Miércoles Mudo, es hora de volver. Y como también hay muchos que vuelven al cole, quizás este post le sirva a alguien de inspiración.
Hace un par de meses conté que había hecho una preciosa mochila de búho para que mi hija llevara su "judogi" (traje) a clase de judo. Como medí las cosas dobladas, y ella las guarda, sola, sin doblar, la pobre bolsa quedó un poco pequeña. Tener que hacer otra más grande me sirvió de excusa para probar una "variación" a la clásica bolsa de tela en versión mochila. Aquí está:
Es, en realidad, la misma bolsa/mochila de siempre pero con algunos detalles especiales.
Para empezar, al montar las cuerdas, permití que sobrara un poco después del nudo de sujeción (como se puede ver en la foto) para que mi hija pudiera tirar de ellas con más facilidad.
La pequeña trabilla por donde pasa la cinta que hace que la bolsa sea mochila la hice de color verde, para contrastar con la cinta que pasa por los hombros, y además combinar con la tela.
Reforcé, con un zig-zag apretado la zona de apertura de la bolsa, y evitar así roturas a la hora de meter cosas.
Y, lo más especial de todo y que le da el "toque" a la bolsa: el cartelito con su nombre. Para ello utlicé la técnica del transfer que expliqué aquí. Quise que las letras fueran lo más parecidas posible a las que vienen impresas en la tela, así es que hice un llamamiento en Twitter preguntando si alguien sabía qué tipografía era. Me respondió Una Mamá Diseñadora, con una similar, que adecué (girando cada letra), y a la que puse los colores lo más similares que pude.
En esta foto se puede ver lo que comentaba en el post sobre el transfer... hay que asegurarse de que la superficie entre la tela y el transfer esté bien limpia. ¡Más aún si tienes un bebé que está perdiendo el pelo como el mío en ese momento! Porque si no puedes tener resultados un poco desastrosos, como aquí.
Corté los bordes del cartel con una tijera en zig-zag, para que fuesen iguales que los distintos cuadraditos de la tela con la que hice la bolsa.
Y lo cosí a mano con un hilo grueso color marrón.
Poco más para tener la mochila lista, con un pequeño detalle de lo más fácil de hacer.
¿Qué te parece? Y tú, ¿Cómo personalizas tú las cosas de tus peques?