Un poco más de cerca los detalles antes de pasar a la explicación:
La base son las mismas bolas de madera que ya os mostré en otros collares de crochet, cubiertas de ganchillo a punto enano (ver tutorial en entradas anteriores) alternadas con piezas metálicas. La del medio es diferente, es especial para colgantes, llevan un ganchito central para unirlos.
Esta vez monté la gargantilla sobre un cordón de los que podéis encontrar en tiendas de bisutería (éste es como plastificado por fuera). Está rematado con cierres metálicos. Suelo sellar los cierres con pistola de silicona pero, en este caso como son muy finos empleé un pegamento especial bricolaje de adherencia fuerte y más manejable cuando sólo queremos una gotilla para pequeñas superficies (me ayudo de un palillo).
El colgante permite todo tipo de variaciones, ésta vez lo hice ovalado. Podéis hacer un molde con goma eva ( mejor la gruesa o dos capas de la fina pegadas) u otro material plástico o metálico, o emplear arandelas ya hechas.
Se recubre con ganchillo puntos rasos todo alrededor cogiendo las hebras desde el centro.
Sobre esta arandela tejí una doble puntilla. Primero una vuelta de 4 cadenetas al aire, un punto bajo que se pincha después de dejar 2 puntos en medio, para ir haciendo arcos. Al terminar repetí la misma operación pero por detrás y pinchando el punto bajo en medio del arco para hacer otros arcos por detrás pero que se fueran alternando con los de delante.
Sobre esta puntilla de atrás hice una vuelta más para rematarla haciendo picos. Tejiendo en cada arco 2 puntos bajos, 3 cad al aire, 2 puntos bajos.
Para darle consistencia y que mantenga la forma se remoja en una mezcla de almidón concentrada (se consigue en droguerías y supermercados, en la zona de productos de planchado) y se deja secar. Aconsejo remojar todo porque varía un poco el color (hacia blanquecino y se va a notar si sólo endurecemos el colgante). Por eso no mencioné la posibilidad de usar cartón como base para hacer la forma ya que la teníamos que mojar...
El anillo es como el que enseñé en la entrada previa de gargantilla y anillo, solo que al ser este un hilo más grueso precisé una vuelta más de aumentos proporcional) (5 v: 3 p, 1 aum) para adaptar el tejido al cristal y el resto igual. Como siempre os digo, las indicaciones son como guías que tenéis que acostumbrar a ir adaptando a vuestra labor y añadiendo ese toque personal.