Así que un día decidí no poner más excusas y plazos (la semana que viene empiezo, el lunes empiezo, en enero empiezo) y simplemete ¡ir haciendo! Así también me evito frustraciones por no llegar a todo. A veces no se puede con todo, y mira, no es para tanto.
Todo esto viene porque tenemos nuevo avance en el comedor. Hace ya un tiempo que luce una fastuosa lámpara geométrica DIY – que ya sabéis que me encanta – y por fin hoy ¡os traigo el paso a paso!
A parte de que es más barata, la puedes hacer completamente e tu gusto, del tamaño que quieras y de la forma y color que más te guste o combine. Esto me vino genial, porque mi casa tiene los techos altísimos y las tomas de luz en las paredes. Eso significaba, que ya para empezar necesitaba un cable extra largo. Además le he puesto unos adornos para el cable de Ikea, muy geométrico todo.
La pantalla
Materiales:
– Tubos redondos de aluminio (estos son de 6mm)
– Un corta tubos. Este es el más económico y sirve para tubos de poco diámetro de aluminio, cobre…
– Alambre. Uno que no sea muy fino, aunque es más difícil de trabajar, mantiene la estructura en si sitio
– Alicates
– Pintura en spray
Comenzamos cortando todos los tubos. La única medida que no aconsejo cambiar, es la más pequeña (2,5cm), ya que ese es el tamaño necesario para que no se escurra del casquillo. Las demás puedes hacerlas completamente a tu gusto para variar el tamaño o la forma
6 de 2,5cm, 6 de 6cm, 12 de 8cm, 12 de 11cm y 6 de 15cm
A continuación, pasamos el alambre por los tubo. Dejo una imágen indicando el recorrido que debe hacer (haz click en la imagen para verla más grande)
Cerramos la pantalla de nuestra lámpara geométrica DIY con un poco más de alambre y recortamos lo que sobre con el alicate.
Finalmente, cerramos la parte de abajo. Para hacerlo enganchamos alambre a un vértice, metemos un tubo de 6 cm, enganchamos al siguiente vértice… metemos tubo… vértice… tubo… hasta terminar el círculo y cerrar.
Así ya valdría, pero para darle un acabado más cuidado, decidí rellenar los huecos que quedaron entre tubo y tubo. Antes de este paso, asegurare de que está simétrica. Al llevar alambre un poco grueso, puedes ajustarla lo suficiente para que quede perfecta.
Para rellenar los huecos, usé un poco de pasta para modelar (vale cualquier tipo de pasta moldeable)
Y para que no se caiga al secar ¡mezcla especial art attack! ¿Os acordáis? Cola blanca un poco diluida en agua y tiras finas de papel higiénico. Sin más y rodeando las uniones. ¡Funciona!
Una vez que todo está seco, sólo queda pintar nuestra pantalla.
El cable y el casquillo
Para el casquillo usé el típico cable de Ikea. Pero no me di cuenta de un detalle: el casquillo es cautivo. Esto quiere decir que no se puede desmontar y como dije antes ¡yo necesitaba reemplazar el cable por uno extra largo!
Tuve que hacer un apaño. Por lo que te aconsejo que si tú también necesitas reemplazar el cable, compres un casquillo normal en una ferretería.
El cable que puse es de una lámpara de taller (tipo taller de coches) que además de gustarme mucho, vienen con un cable larguísimo y, para rizar el rizo ¡de colores!
Los adornos para el cable
Hacía tiempo que me llamaban la atención las decoraciones de cable de Ikea. Ponerlas y quitarlas es muy sencillo, me parecía que a mi lampara le daban un toque y además, las he pintado en un momento con spray a juego con el negro y amarillo. Aunque hay que dejarlas secar muy bien antes de manipularlas.
¡Y ya sólo queda juntarlo todo!
Puse el embellecedor en la pared y el cable laaaaargo hasta el techo. Enganché los adornos, coloqué la pantalla con la rosca que trae el casquillo y le puse una bombilla Edison. Porque si algo me gusta de este tipo de pantalla es que deja ver la bombilla… Y esas bombillas… Me tienen enamorá.
¿Qué te parece el resultado? Y volviendo al tema de los propósitos
¿Cómo hacéis vosotras?¿Hacéis lista, uno al año, a lo largo del año, ninguno?
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