Hola!! Seguimos con los trabajos para la tienda....
Como he comentado en otro post, estos trabajillos los he estado haciendo en la casa que era de mi abuela, grande y antigua, y deshabitada. Allí he improvisado un taller que me permitía trabajar con más espacio para manejar tanto la VITRINA como el ESPEJO. Llevaba tiempo viendo allí este marco, roto, lleno de suciedad, y se me ocurrió que podía sacarle partido. Así es como se convirtió de un triste marco abandonado a un espejo precioso.
Como puede apreciarse en las fotos, al marco le faltaban varios trozos repartidos por todo alrededor. Se me ocurrió que podía usar pasta de modelar, de la que se usa para los estarcidos en relieve, e intentar rellenar los huecos siguiendo un poco la forma de los dibujos. Era más difícil de lo que pensaba, quizá porque la elección del tipo de pasta no fue la adecuada ya que necesitaba una que tuviera más consistencia para modelar los dibujos. Pero hice lo que pude y rellené todos los huecos como buenamente me fue saliendo.
Pensé que como la iba a pintar, no se notarían mucho, y así fue. Usé el mismo esmalte satinado de color plata que para el espejo grande, pero esta vez no puse ningún tipo de imprimación, directamente pintando sobre el dorado.
Poco a poco, pinté todo el marco y con la segunda mano, ya ni se notaba dónde había estado roto ;) La verdad es que estaba quedando precioso...
Lago había encontrado un espejo de probador que estaba un poco roto por una esquina en el mercadillo de segunda mano. Como estaba muy bien de precio, lo compró y se me ocurrió que podíamos recortarlo y usar el marco para hacer un espejo. En un pis-pas, el cristalero lo cortó y nos lo montó. Y así de majestuoso preside la entrada de la tienda...
Ya sabéis, si queréis verlo en vivo y en directo...
...en calle San Rafael, número 6, San Fernando...
Hasta muy prontito!!!
Fuente: este post proviene de Blog de PiliRey, donde puedes consultar el contenido original.
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