Daisy estrena muebles y yo tengo un nuevo plan | blog 12

Voy a tratar de no hacer esta entrada muy larga, pero hay muchas cosas que quiero contarles. Dejar el blog y/o el canal es algo que me planteo al menos una vez al año, principalmente por razones de tiempo, con preguntas que seguro ustedes se han planteado alguna vez como si esto tiene sentido o para qué gastar tanto (dinero, tiempo y esfuerzo) en algo que es un pasatiempo.

Lo cual significa que al menos una vez al año, entro en crisis y después de mucho divagar llego a la misma conclusión casi siempre: seguir adelante.

Para mi el blog y el canal significan libertad para ser creativa, pues es algo que en la vida diaria no tengo. Soy una persona creativa, no por el hecho de que pueda inventar algo innovador, sino porque necesito hacer algo, crear, echar mi imaginación a volar y eso me lo proporciona el blog. Está bien, sin el blog también puedo hacer cosas, pero sin la motivación de tener una fecha y un compromiso con mis lectores, es algo que se iría dejando para después y al final haría mucho menos de lo que hago ahora (ya he probado).

Sin embargo, como les comentaba hace días, no se me ocurría absolutamente nada, y la motivación no era suficiente, andaba "con las pilas bajas", hasta que hablé con Yoli e Ysne. Yoli me sugirió darme un respiro, y fue lo que hice para poder plantearme qué quería hacer, a donde quería llegar y sobretodo si tenía sentido lo que hacia. Ese tiempo me ayudo mucho a darme cuenta de algunas cosas, resumidas en el párrafo anterior, pero que van más allá de eso y es algo que aunque no encuentre las palabras seguro muchas de mis compañeras que están en las mismas, han comprendido ya.

También había que superar mi crisis creativa, porque literal me sentía como un pecesito fuera del agua buscando regresar al mar de las ideas, pero no ocurría, así que simplemente me deje llevar por otro camino. Desde niña me han gustado los proyectos como el que les muestro hoy, pasaba más tiempo tratando de hacer la ropa de mis muñecas, sus muebles y demás, que jugando, y me conozco, cuando empiezo muero por ver el resultado aunque a la mitad del camino me pierdo y las cosas no terminan bien, jaja. No estaba segura de empezarlo, porque es una idea infantil, algo sosa, pero era lo único que se me ocurría, así que me deje ir como hilo de media para conseguirle a Daisy una casa que también pudiera servir como escenario para que presente las entradas de la sección Recetas.

Todo empezó con el Reto Una galleta un cuento, donde comencé a utilizar a Daisy para darle mayor realce al cuento que trataba de referenciar la receta en cuestión, y cuando estaba en plena sesión me asaltaban cosas como "necesito una silla", o me vendría bien una estufita, o algo, jaja. Así que, la idea era comprar un comedor en una pequeña feria local de juguetes artesanales que se hace donde vivo durante dos semanas al año. Pero antes de que llegara la feria, compré la sala que les mostré hace meses.



La pinte de blanco y le hice algunos mini cojines, ¿les gusta?





Luego llegó la feria de juguetes y compré un refrigerador y una estufa de latón, también quería algo que hiciera la función de cocina, pero lo que había era muy peque, así que me tocó hacer un mueble de cartón (medio cutre, pero cumple).





También compré el comedor que quería en un comienzo y lo pinté de blanco (era de Pepa), y cada silla de un color diferente, para hacer un poco de referencia al comedor de Mónica en Friends, serie con la que me había obsesionado en meses pasados. El trastero ya lo tenía de hace mucho tiempo y lo usaba de decoración. Mi mamá hizo el mantel.




Supongo, que viéndome tan interesada en conseguir mis muebles (y no sabiendo que la razón era salir de un bloqueo, osea que no iba a durar), mi mamá se subió al barco. Ella tiene un blog desde hace años intacto, que se llama Una barbie con estilo, sólo tiene dos entradas, pero en últimas semanas hemos grabado un vídeo y hecho algunas fotos, que un día de estos subiremos por ahí para que se pasen si gustan y por favor, jeje. Tiene 6 muñecas y dos de ellas acompañan a Dasiy en este recorrido por su casa. Ella quería hacer un tutorial de un pijama y quería una cama, así que compré una cama también, aunque mi idea era limitarme a la cocina que es lo que yo podría usar; conseguí de último una cómoda y dos buros que me hace falta pintar, pero esa, en resumen, es la historia de cómo Daisy llego a conseguir una casa a la que sólo le hace falta el baño.




Respecto a mi bloqueo, creo que está superado porque las ideas han vuelto a fluir, el blog seguirá porque necesito hacer mis pequeños proyectos para mantener la cordura y como de igual forma los haré, de una vez aprovecho para compartirlos. Aunque sí bajarán por tiempo indefinido mis publicaciones, subiré vídeo cada dos semanas en viernes igual y las entradas en el blog serán igual cada dos semanas y alguna extra cuando haya un blog como este, un reto al que me muera por asistir, una colaboración o simplemente, porque quiera decir algo. Esto es, para no asfixiarme, tener más tiempo para preparar mis manualidades, editarlas y porque he decidido enfocarme en mi canal literario y mi blog de reseñas que siempre han estado en último termino, pero que son lo que más disfruto hacer, así que nada, si quieren pueden verme/leerme por allá.

Perdonen por este post, por lo general trato de hacerlos cortos para no ser pesada, pero tenía tantas cosas que contarles y recapitular que decidí dejar los prejuicios de lado y abrirme con ustedes. Y la pregunta a mis compis bloggers para acompañarnos ¿coincidimos?, ¿ustedes por qué escriben un blog?