Los espejos son un objeto muy útil en casa. Se suelen colocar tanto en la entrada como en la habitación, sobre todo para poder comprobar cómo vamos vestidos antes de salir. Sin embargo, su elección es complicada, ya que muchas veces no encaja con la decoración o cuando lo encontramos, tiene un tamaño que no nos conviene.
La usuaria Gaviota33 ha optado por ganar espacio en su hogar colocando este maravilloso espejo que lleva dos bisagras en la parte de atrás con las que está unido a una caja. En su interior tiene cabida desde una botella de vino hasta una percha. Es ideal para guardar objetos que no queramos que descubran. En este post tenéis las imágenes.
La lectora Nelay ha reformado un antiguo espejo que traía una decoración navideña y lo ha personalizado a su gusto. Con un cúter le ha sacado las ilustraciones y con una lijadora lo pulió. Posteriormente, lo limpió y cubrió con cinta carrocera. Por último, lo pintó y adornó con la técnica de decoupage y con latón. En esta página veréis su obra.
La usuaria Isabel86 le ha dado un toque de color y alegría con esta hermosa ornamentación de estilo árabe. Está hecho con cristal Tyffany, la cual consiste en una combinación de pequeñas piezas en distintas tonalidades imitando una vidriera. En este post contemplaréis las fotografías.
También para ganar algo de espacio, lo mejor es reconvertir un espejo de pie en uno fijado a la pared. Para ello, le quitamos el marco y la base y con unas bisagras y lo fijamos en la habitación que queramos. Esta ha sido la idead de la lectora Pirotessa. En esta página observaréis su trabajo.
¿Y vosotras, habéis arreglado algún espejo? ¿Cómo lo habéis hecho?
Imágenes: Gaviota33, Nelay, Isabel86, Pirotessa