Todos tenemos en casa esas hojas ya escritas pero con suficiente espacio como para seguir usándolas. En mi casa las llamamos hojas sucias, u hoja en sucio, que usamos para eso, para garabatear, coger alguna nota o lo que sea. Mi hermana y yo teníamos cuadernos de esos mil, así que me dediqué a arrancar todas las hojas y hacerlas bonitas hojas caseras artesanales que quedan de lo más vintage, las podéis usar para scrapbooking, regalos, cartas etc...
Os voy a poner aquí el paso a paso y luego los trucos y consejos para que no os pase como a mí, pero en el video lo tenéis todo explicado y visual. ¡Comencemos!
-Las hojas que tengamos sucias, vamos a cortarlas en trocitos y meterlas en agua para que empapen. Cuando estén mojaditas las vamos a triturar muy bien hasta que quede una pasta. (El primer truco es que no queden tantos grumos como me quedaron a mí, porque si no, el papel va a quedar más grueso)
-Podéis haceros un bastidor como el mío, o también he visto que con dos cuadros podéis recrearlo súper fácil. (Otro consejo es que no queráis hacerlo tan grande, es mejor más pequeño)
-La pasta de papel hay que echarla en un cubo con agua, o barreño (truco, no mucha cantidad, lo iréis viendo)
-Después con un movimiento de los cuadros, hundiéndoles en el agua, el del marco por encima del de el bastidor, esperamos a que se filtre el agua y ya tendríamos lista la hoja para llevarla a una tolla de algodón y con ayuda de un paño, quitar el exceso de agua para que se quede pegada en la toalla (todo este proceso se ve bien detallado en el vídeo)
El trucazo es que la tela del bastidor sea más plástica, que no absorba mucha agua, y así se despegará de él super fácil.
Si os quedan un poco dobladas, con ponerle peso por encima quedarían perfectas. Y eso sería todo. Os dejo el vídeo aquí, espero que os guste y si tenéis cualquier duda aquí estoy para ayudaros en todo lo que sepa. Nosotros nos vemos en el próximo post. ¡Adiós!