Para este modelo vas a necesitar una plancha de imán, un trozo de cartulina, tijeras, pegamento, fibras o pintura acrílica y material para hacer el mosaico, como piedras, botones o venecitas.
Primero tienes que marcar el diseño en la cartulina, teniendo en cuenta el tamaño de las venecitas, botones o cualquier objeto que hayas elegido para su decoración. También puedes utilizar fotografías en lugar de la cartulina.
Coloca el imán tras la cartulina o fotografía y pégalo con un pegamento fuerte que haga que no se despegue con facilidad. Deja secar y ¡ya tienes tu imán personalizado!
Con formas de moldes
Si tienes moldes de galletas o de cubitos de hielo con formas divertidas, originales y decorativas, también puedes aprovecharlos para esta manualidad. En este caso, sólo tienes que elegir una masa que endurezca fácilmente. Es tu elección, pero puedes usar desde cemento hasta plastilina. Una vez el muñeco esté duro, píntalo con témperas y deja secar. A continuación, pega en la parte posterior el imán y ¡listo! También tienes la opción de hacerlos con una forma indefinida y pintarlos de un gris claro para que simulen ser piedras y resulte una decoración más sobria y elegante.
Cajas de alimentos
Si te gusta el estilo vintage puedes utilizar pequeñas cajas de alimentos, como cajas de chicles, quesitos y otro tipo de cajas pequeñas para hacer tus imanes. Primero selecciona una de las paredes de la caja (la que no quieres que se vea) y pega ahí el imán. Si el imán es muy fuerte puedes ponerlo directamente por dentro sin tener que usar pegamento. Y si quieres sorprender aún más a tus invitados, puedes rellenar las cajas con caramelos o dulces para las visitas. Genial, ¿verdad?
Ahora ya tienes varios ejemplos para fabricar tus propios imanes para la nevera. Ya no tienes excusa para mantenerla totalmente vacía. Si tenéis más ideas sobre imanes o habéis fabricado los vuestros, ¡enseñádnoslos!
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