Puede decirse, por lo tanto, que customizar un objeto es lo mismo que personalizarlo (adaptarlo a nuestro gusto). La noción de customizar es frecuente en el ámbito de la moda y de la indumentaria, aunque también se utiliza en el marketing.
Compré una remera en un supermercado, como es obvio había varias iguales, entonces decidí hacerle algún adorno para diferenciarla. De esa manera iba a tener una prenda más personal.
Junte en casa los “puchitos” de lana que podían combinar, luego busqué en una revista de crochet una puntilla que abriera hacia abajo, para adaptarla al escote.
Medí el escote y comencé a trabajar, sólo que al terminarla me gustó más distribuirla en el frente.
Customizando o personalizando una remera
La única diferencia de la puntilla, respecto del patrón, fue que en medio de las onditas de la última vuelta en punto bajo, agregué unas lagrimitas en violeta. Y fue así, antes de comenzar con la lana gris, enhebré en ella tantas lagrimitas como onditas tenía la puntilla. Luego en la mitad de cada una de ellas hice un punto cadena al aire, pasé la cuentita, hice otro punto cadena y luego otro punto bajo en el mismo punto central. Las lagrimitas quedaron para adentro, para que queden hacia afuera hay que hacer más larga la cadenita central.
Está cosida a mano con lana verde y pequeñas puntaditas, para su distribución medí bien el centro del escote y el centro de la puntilla.
Espero que te guste y te dé ideas, si quieres manifestarlo puedes hacerlo en “Anenka”. Gracias.
Detalle y patrón de la puntilla