1. Pasa sin tejer el primer punto de cada vuelta.
Cuando somos principiantes y tejemos de un extremo a otro (no en circular), es un clásico que el borde de la labor nos quede muy irregular y que de repente, sin saber cómo, tengamos más puntos de los iniciales. Para evitar que ocurra esto, pasamos el primer punto sin tejer.
Tenemos que pasar el punto como corresponda. Si corresponde tejer el punto del derecho, lo pasaremos como si lo fuéramos a tejer del derecho, pero ojo, sin tejerlo. Si corresponde tejerlo del revés, lo pasaremos (sin tejer) como si lo fuéramos a tejer del revés. De esta forma el inicio de la labor queda más regular y evitas el aumento de puntos no deseados.
Cuando tejemos en circular esto es algo que no ocurre y por su puesto hay que tejer todos los puntos.
2. Utiliza marcadores.
Seguramente, si estás empezando, colocar marcadores te da mucha pereza. Ver una labor con numerosos marcadores parece indicar que tiene mucha dificultad. Pero es todo lo contrario.
Colocar marcadores no debe darnos pereza porque facilita muchísimo la labor. Nos sirven de guía y nos ayudan a tener mucho más claro los puntos que corresponde tejer en cada momento.
3. Coloca una línea de vida, sobre todo cuando tejes calados.
Una linea de vida es una hebra de otro color que introducimos a lo largo de todos los puntos de una misma pasada. Lo hacemos porque si en algún momento nos equivocamos podremos deshacer hasta la linea de vida con la seguridad de no perder ningún punto.
Son muy útiles sobre todo cuando tejemos encajes o cenefas, porque en estos casos, deshacer es mucho más complicado que cuando estamos tejiendo puntos más sencillos.
Una forma curiosa de colocar una linea de vida es utilizando un cabo de hilo dental. Si tejemos con agujas circulares intercambiables, podemos introducir el hilo dental en el agujerito que tienen para ajustarlas al cable. De esta forma, según vamos tejiendo la vuelta, el hilo dental va pasando por cada punto y cuando llegamos al punto de inicio unimos los dos extremos con un nudillo y ya tenemos la linea de vida colocada. Yo descubrí esta técnica gracias a Marianela Galo y su podcast Knit es tejer.
4. Teje una muestra de tensión.
Otro clásico de la pereza tejeril es la muestra de tensión. Tejer muestra sí que da una pereza enorme, por lo menos a mí. Si vas a tejer un proyecto pequeño o algún complemento, no es tan necesaria. Pero si vas a tejer una prenda de vestir es muy importante. Gracias a la muestra de tensión, sabemos si tenemos que hacer algún ajuste respecto del patrón que vamos a tejer.
Y ojo, si se trata de un patrón tejido con agujas circulares, debemos tejer la muestra en circular, porque la tensión varía cuando tejemos de lado a lado o cuando tejemos en circular.
5. Utiliza las agujas que se adapten mejor a tu forma de tejer.
Olvídate de las modas, cada tejedora tiene sus agujas. El material del que están hechas las agujas influye en nuestra forma de tejer, por eso es importante sentirse a gusto con las agujas. Y eso solo depende de ti.
Algunas tejedoras prefieren las agujas de madera y las hay que prefieren las de metal. No significa nada, ni que tejes mejor o peor. Conozco tejedoras fabulosas y expertas que tejen con madera y otras igual de buenas que tejen con metal.
Si quieres saber un poquito más sobre la diferencia entre los tipos de agujas, puedes leer este post:
>>Cómo elegir tus agujas: ¿madera o metal?
Y hasta aquí mis cinco consejos para tejer mejor. ¿Sigues alguno de ellos? ¿Se te ocurre algún otro? Cuéntamelo aquí en los comentarios.
Un abrazo