Después de unas vacaciones “blogueras” un poco más largas de lo que nos hubiera gustado, ya estamos de vuelta, hoy os enseñamos cómo hemos transformado unas viejas macetas en portalápices.
Es un DIY super sencillo, además de las macetas solo hemos utilizado Chalk Paint y pinceles para pintarlas y washitape para ayudarnos a definir el diseño.
Vamos con el paso a paso:
Lo primero que tenemos que hacer el limpiar bien las macetas para eliminar los restos de tierra, y una vez limpias las dejamos secar.
Nosotras hemos optado por hacer un diseño en dos colores, y para ello hemos colocado washitape alrededor de la maceta, en las zonas donde queríamos delimitar los colores. Una vez colocado el washitape, hemos dado el color de base a la maceta, hemos decidido pintarla en azul. Hemos querido darle un aspecto un poco mas rústico por lo que hemos aplicado la pintura de forma “imprecisa”, dejando marcadas las cerdas del pincel.
Como ya sabéis es el Chalk Paint es un tipo de pintura que cubre muy bien así que con una sola mano de pintura ha sido suficiente, y además como se seca rápido no hemos tenido que esperar demasiado para retirar el washitape.
Solo nos queda pintar de un segundo color las zonas que estaban tapadas, nosotras hemos hecho las líneas del color opuesto a la base, y así es como nos ha quedado.
Tenemos unos portalápices extra anchos para guardar nuestros rotuladores y pinturas.
Nosotras seguimos con nuestros proyectos, sencillos, para todos y a los que cada uno puede dar su toque personal, en base a nuestras ideas.
Un abrazo fuerte a tod@s