Esta balda-casita lleva a mi lado más de 20 años... Y este es el tercer cambio que sufre. Me la compró mi madre (y otra igual a mi hermana) en madera en crudo, y la pinté de amarillo. Contenía pequeños jarrones de cerámica. Hace dos años, mi madre, que hacía limpieza, me dio un ultimátum, así que me la traje a mi casa, y la pinté de blanco, poniendo alguno de los huecos en rojo y azul. Así, combinaba con los colores de los gemelos. Pero nunca la llevaron a valorar (los niños son así...).
Y yo seguía dándole vueltas a qué hacer con ella.... Alguna vez pensé en hacer una especie de cajón de imprenta con bordados, pero no me terminaba de convencer. Y esta mañana, cuando me he despertado, he dado con la tecla: decorarla con alguna de las servilletas (pañuelos de papel, más bien) que compré hace una semana en Dénia (es que hemos estado 5 días por allí...).
Así que después de comer, me he puesto manos a la obra. Las servilletas son preciosas (la próxima vez os las enseño, que con la locura creativa no he caído en hacer fotos de ellas). Uno de los paquetes es de casitas de pájaros, que son de las cosas que más me gustan. Y he empezado poniendo varias de ellas seguidas, en la parte superior de la casita.
Y es que el tema "pajaril" es la línea que estoy siguiendo en el dormitorio de Celia, acompañando a las otras casitas que ya puse:
Recortando, combinando...
Y para que no fuera mono temático, he usado también servilletas que ya he empleado otras veces, como las de las rosas...
Poniendo una mariposa de una de las servilletas nuevas sobre las ya usadas en otras ocasiones, para romper... En ese momento estaba ya "disparada"... Recortando, dejando que las nuevas mariposas se posaran en lugares desconocidos, que los pájaros abandonaran un entorno abigarrado...
Sin importarme que quizá resulte demasiado colorida la composición... Pero es que me he dejado llevar por una tarde de domingo en la que echarse la siesta era imposible.
Si queréis aprender cómo hacerlo, en este video-tutorial sobre la técnica del decoupage os lo enseño.
Un fin de semana muy productivo, haciendo transfers sobre una bandeja (que me queda por rematar), poniendo vinilos en los cristales de la ventana del dormitorio de Celia y de la terraza de casa de mis padres (que ya os enseñaré), y pensando en labores para las noches veraniegas, que aunque al día siguiente haya que madrugar, parece que las noches son más largas... Quizá empiece un pequeño cajón de imprenta... Algo que además es fácil de transportar...
Muchas gracias por vuestros comentarios del otro día. Es que a veces, como ya os dije, nos creamos obligaciones, y vuestros comentarios me reconfortaron. Y mucho. Gracias por estar ahí, al otro lado de la pantalla.
Y el miércoles, os enseñaré cómo participo en el Reto Facilísimo, que este mes va de frutas... Complicado para alguien como yo, que considera que cinco cerezas pueden considerarse como "las cinco piezas de fruta diarias" (y eso, en verano, que el zumo de brick también cuenta como fruta, ¿no?)
Que empecéis bien la semana!!!
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