No es necesario ponernos a pensar en cada cosa o situación que hará que Alicia aprenda texturas, olores, comportamientos si no que tan solo disfrutar de una tarde de paseo al aire libre o una tarde en casa en bata y zapatillas hace que sin que nos demos cuenta estemos aportando a nuestra pequeña y a nosotros mismos una serie de aprendizajes muchísimo más enriquecedores, significativos, divertidos y placenteros.
Desde que nació Alicia me tomo las tardes libres, cada día salimos a pasear, si el tiempo lo permite. No me voy lejos de casa pero sí que es verdad que me paro a pensar todo lo que tengo a mí alrededor, lugares a los que nunca iba por tiempo o trabajo los cuales ahora visitamos y disfrutamos.
Y los días de lluvia yo aprovecho para seguir dando un empujón a “por ti misma” proyecto en el que Alicia colabora activamente, ya sabéis, si toca receta ella ayuda a echar los ingredientes, si hay que coser a máquina, desde el cólo de mamá se ve mejor, una experiencia única e irrepetible. Nunca la fuerzo, a veces ni le digo si quiere participar porque veo que está jugando y entretenida, pero al rato esta a mi lado llamando mi atención.
Las horas que Alicia duerme o está en la escuela es cuando más aprovecho para dar el empujón a mis proyectos, cuando tengo que sentarme y concentrarme. Madrugar y acostarme muy tarde es lo peor para mi, soy muy dormilona, pero el placer de poder disfrutar cada segundo a su lado me hace muy feliz.
Siempre lo tuve claro, yo quiero educar a mis hijos y hacer el papel de madre que me corresponde, no hablo de la madre perfecta, porque no existe, pero sí de la madre que yo quiero ser.
Fue una decisión que tomamos Javi y yo cuando me quede embarazada, y fue una importante y gran decisión.
Gracias a Alicia nació portimisma.com y mi línea de tocados y complementos la cual lleva mi nombre; Laura Balado y la que muy pronto os presentaré.
Pero la realidad es que no todas las mamás o papás lo podéis hacer, por desgracia en España no existe la conciliación familiar.
¿Tú concilias? A lo mejor ya hay muchas empresas que apliquen este derecho y yo no me he enterado. Cuéntanos tú caso, compartirlo nos ayudará a todas y a todos.
Hablando con amigas, las que tienen hijos y que son trabajadoras por cuenta ajena, siempre que sale este tema me dicen; es que es imposible, en mi empresa no se podría, y me dan una serie de razones, la verdad es que son explicaciones lógicas que me hacen pensar. El sistema está organizado de tal manera que no hay hueco para la conciliación, tal vez porque tenemos asumido que no existe, tal vez por miedo a quedar sin el puesto de trabajo, tal vez por desconocimiento de que es conciliar (horarios, salarios, puesto de trabajo).
Tenemos el privilegio de ser madres, no la desgracia de que una vez que lo somos ya no podemos seguir siendo eficientes en nuestro trabajo, tan sólo necesitamos llegar a acuerdos. Sin pararnos a indagar, y sólo como un pequeño ejemplo a simple vista tú sabes como yo que los horarios de colegio no coinciden con los de trabajo, festivos y vacaciones que no coinciden con los laborales. ¿Vivimos en el mundo al revés?, que alguien me lo explique por favor.
Cuando ejercía como directora en una escuela infantil vino una madre a pedir plaza para su hijo, ella necesita nueves horas, NUEVE HORAS, en un centro educativo, once meses al año. Sólo de pensarlo me caen gotas de sudor. Por un lado y no lo más alarmante, no podía darle nueve horas ya que la estancia máxima por ley era ocho horas al día, pero esta madre trabajaba a media hora de la escuela y comería sentada en su mesa trabajando. En este caso no había papá, sólo mamá. ¿Cómo hace?, me vi impotente ante tal situación. ¿Qué nos tienen que prohibir tener hijos?, ¿sacarnos el derecho al trabajo?, seamos realistas.
Y no nos olvidemos de lo más impensable del mundo, también pueden conciliar esos olvidados, los padres.
Lo que no puede ser es que solo conciliemos las que emprendemos, porque no todo el mundo puede emprender un proyecto y porque no hay por qué renunciar a un puesto de trabajo que no quieres perder.
Y yo como emprendedora que para poder hacerlo he dejado un puesto de trabajo, mi carrera profesional, mi salario mensual, mi estabilidad económica, vacaciones pagadas, pagas extra y un largo etcétera.
Solo deseo que entre todos luchemos por todos. Hazlo por ti.
Gracias por estar ahí.
Laura Balado.