Así es como NOSOTROS la hacemos:
Ingredientes:
-Aceite (en mi caso uso aceite de oliva virgen extra, la uso para todo pero igualmente se puede hacer con cualquiera, aceite de oliva, de girasol, da igual, está claro que el sabor no va a ser el mismo, pero están ricas uses el aceite que uses.
-Patatas.
-Huevos.
-Sal.
Optativos:
Infinidad de alimentos, yo la suelo hacer con chorizo, con pimientos, con cebollas... ahí el gusto de cada uno.
Yo he utilizado como kilo y medio de patatas y usaré 6 huevos bien grandes.
Preparación:
- En primer lugar se pelan las patatas.
- Una vez las hayas pelados, se cortan. Yo las patatas grandes las suelo dividir en 4 partes y las voy cortando en rodajitas no muy gordas, que si no luego tardan en hacerse o se quedan crudas.
- Cuando ya están todas cortadas a rodajitas, se ponen debajo del grifo y se lavan bien, para que se les vaya la tierra y algo de almidón.
-Este paso que pongo ahora no es obligatorio pero a mí personalmente me gusta hacerlo así. Una vez que las he pelado y las he lavado, las pongo en agua un ratito. Así es del tamaño y grosor que yo las suelo cortar, no tiene por que ser así a ciencia exacta. Luego se les quita el agua y se les echa la sal.
-Pasamos a freírlas. Se coge una sartén y se le echa aceite, que tienen que cubrir justo las patatas, sin que sobre mucho. Que eches más o menos patatas dependerá del tamaño de la sartén. En mi caso es grande y aún así tengo que hacerlo a veces en dos tandas, dependiendo de lo grande que quiera la tortilla porque si las echo todas de un golpe la vitrocerámica termina hecha un asco, al darle vueltas se sale mucho aceite y las patatas. Echar cuenta que al moverlas, las patatas se pueden ir rompiendo (es normal). La cantidad final de patatas va a disminuir su tamaño. Mientras se están friendo las vamos moviendo poco a poco con un utensilio de cocina para que se vayan haciendo todas no sólo las que están más abajo y para que no se peguen.
-Cuando ya se han terminado de freir, se retiran de la sartén con una espumadera. Yo las pongo encima de un plato con papel de cocina para que suelten un poco el aceite.
-Luego se baten los huevos, se le echa un poco más de sal. Una vez batido se le incorporan las patatas fritas y se remueve bien para que se mezcle todo. En este caso, añadí las patatas y un poco de chorizo que había cortado, porque a nosotros nos encanta con chorizo.
-Cuando esta todo mezclado, yo utilizo otra sartén (por no lavar esa cuando está caliente, los fabricantes no recomiendan fregar las sartenes estando calientes). Le echo unas cucharadas del aceite que me ha sobrado de freir las patatas y lo pongo a calentar.
-Una vez se calienta el aceite, se echa todo a la sartén y se deja unos minutos. A más minutos esté la tortilla en el fuego, más se cuajará el huevo. Eso va a cuestión de gustos, hay quien les gusta poco cuajado el huevo por dentro y hay a quien les gusta más. Id moviendo la sartén para que la tortilla se vaya repartiendo por toda la sartén a partes iguales y no se quede pegada al fondo. Es frustrante que se peguen. Intentad utilizar sartenes que no se le peguen alimentos.
-A continuación, se le da la vuelta a la tortilla, yo lo hago con un plato tal que así. Me pongo en el fregadero porque a veces suele salir aceite y huevo. Este paso hay que hacerlo con mucho cuidado para no quemarse con la sartén o con el líquido que pueda soltar.
-Al poner la otra cara de la tortilla en la parte de abajo, se va nivelando con la espumadera para que esté más o menos recta y se retocan los bordes, intentando que queden para dentro y quede así bonita.
-Del mismo modo que se le da la vuelta, se saca de la sartén. Se retira el sobrante de aceite que pudiera quedar en al plato al darle la vuelta a la sartén y ¡a comer!
Yummy