Ya sabéis que están muy de moda las formas geométricas desde hace un tiempo en decoración de todo tipo de objetos como pantallas de lámparas, cajitas, porta-velas, marcos de fotos... generalmente combinados con colores muy metálicos, os dejo unos ejemplos:
El porta-velas y la lámpara son de Søstrene Grene y el resto de Zara Home.
Normalmente las geometrías no son lo mío, me suelen parecer frías y poco personales pero la temporada pasada precisamente en Zara Home tenían a la venta unos servilleteros que me llamaron mucho la atención. Seguían esta tendencia y, aunque estaban pintados de colores más llamativos, eran de estructura metálica. Costaban 12,99 euros y por alguna razón me conquistaron, a partir de aquí se abrió oficialmente la veda para las cosas geométricas pero siempre combinadas con recursos más cálidos y hogareños (¡ey! esto es solo una opinión personal):
Yo me guardé esta foto (menos mal porque ya no están en la web) y se me ocurrió que esta estructura sería fácil de reproducir pegando trocitos de pajitas de plástico con silicona caliente. No buscaba un servilletero resistente a mil batallas sino un detalle bonito para adornar la mesa de Navidad. Lógicamente el acabado no es comparable al original pero en mi caso no es necesario, siempre suele haber algo que enciende la bombillita de la creatividad y en este caso fue así.
Cuanto más caliente esté la pistola mejor sale la silicona y menos hilitos hace de esos que luego hay que arreglar. Después de hacer mis cubitos pasé a rellenar los huecos de las pajitas con pegotes de silicona simplemente para darle un acabado un poco más bonito. Y ahora toca pintar, muy fácil, con spray dorado por todos los ángulos.
Para enseñaros el resultado final lo suyo hubiera sido una mesa preciosa de Navidad pero aún es pronto así que he hecho una pequeña recreación en casa para poneros en situación:
Realmente espero que estas cositas que se me ocurren os sirvan de algo y os gusten.
¡Hasta pronto!