Falta muy poco para que sea abuela. Es una niña, y seguro será preciosa. Y aquí andamos toda la familia, “ensoñándola”.
Los psicoanalistas hablan de “reverie” , de esa capacidad que tiene la madre para “ensoñar” a su hijo, para poderlo pensar, para tenerlo en la cabeza, sentir sus necesidades, casi adivinarlas, recoger su angustia y transformarla. Las madres ensoñamos a nuestros hijos, desde el primer día que sabemos que vendrán, y así para siempre. Yo me siento feliz de ensoñar a los mios. Y ahora, haciendo huequito a mi nieta.
Tengo mas en producción que ya os iré mostrando…