Este archivador de oficina me pareció ideal para guardar los minerales y fósiles, las llaves antiguas y las monedas que colecciona mi hija Ariadna, pero para darle un aire más informal y decorativo forré el frontal de los cajones con papel de diario marroquí utilizando la técnica del dècoupage.
Para darle un acabado más uniforme y facilitar su limpieza, finalicé con un par de capas de barniz.
Ahora los minerales y las llaves están bien guardados y ordenados.