Aquí os enseño un par de fotos de la feria de 1985 donde podéis ver a nuestra madre con un traje negro, nuestra tía con un traje rosa y nuestro queridisimo abuelo.
Los trajes antiguos tenían el talle alto y mangas muy pomposas pero con unos cuantos arreglos se pueden transformar en trajes más actuales. Al traje negro de mi madre le he quitado las mangas de farol, bajado el talle y convertido los volantes en una falda canastera. Aquí podéis ver como luce mi hermana con el traje que mi madre compró hace 30 años.
Algunos trajes no necesitan ni siquiera arreglo. El año pasado mi hermana lució por el Real el traje rosa de mi tía. El taje nos gustaba tanto como era que decidimos no hacerle ningún arreglo.
Aquí os enseñamos el antes y el después de los dos trajes y os animamos a que vosotras también saquéis los trajes antiguos y los paseéis por el Real.
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Un beso y feliz feria, Eugenia.