Pues bien, me parece genial para aprovechar los restos tanto de telas, botones sueltos, como de hilos de perlé para bordar y porque además las piezas cobran un valor añadido al ser únicas y también se puede decir exclusivas y ser una labor especialmente gratificante, al menos para mí y ahí va mi primer intento de forrar una libreta:
por delante
abierta
Como ésta libreta es para mí y sólo para mí, los trocitos de telas elegidas tienen tonos verdes.
No he tenido que comprar nada porque hasta tenía la libreta, así que mi stash de materiales sigue bajando y os aseguro que voy a hacer unas cuántas más ya que me gusta tener cositas hechas para cuando surge hacer un obsequio.
Hace bastante que no participo en RUMS y con ésta entrada me presento de nuevo y ahora me voy a visitar a las demás participantes ¿me acompañáis?