Esta técnica fue originalmente utilizada en la pintura al temple ya que ese tipo de pintura no permitía utilizar capas muy empastadas y por lo tanto había que buscar alguna forma de transmitir el efecto de profundidad y volumen a través de capas muy delgadas.
Es una técnica que proviene del siglo XVI y fue utilizada por pintores como Rubens, Van Duke y Snyders, y a pesar de que es una técnica bastante llamativa no se suele enseñar en las escuelas de arte por lo que muy pocos pintores la conocen.
Veamos en qué consiste esta técnica:
El primer paso es en realidad tres pasos en uno: El dibujo, la imprimación (sólo para entonar el lienzo) y el manchado para establecer las luces y las sombras.
El siguiente paso la capa ?muerta? o grisalla. En esta capa debemos repintar sobre la capa anterior de forma cubriente. Supone la capa más importante de este método ya que en esta capa es donde debemos emplear más tiempo revisando la forma, las sombras y los brillos. Al final de esta capa deberemos tener el cuadro terminado? sólo que en escala de grises.
Ahora empezaremos a dar veladuras de color al cuadro. Hay que usar mucho medium y muy poca pintura. Podemos dar tantas capas de veladuras como deseemos hasta conseguir la intensidad de colores que queramos.
Seguimos dando capas de veladuras.
La última capa consiste en pintura mucho más opaca principalmente para aplicar los brillos y redefinir
aquellas zonas que se hayan podido perder después de tantas veladuras.
Debemos tener en cuenta que para obtener un buen resultado con este método debemos emplear óleos que sean transparentes o semitransparentes, ya que los colores opacos nos taparían los matices de la grisalla. También debemos tener en cuenta que este método es muy lento porque debemos dejar secar muy bien las veladuras antes de seguir aplicando las siguientes capas de veladuras.
http://borranchos.wordpress.com/2012/07/04/metodo-flemish/#more-127