Comenzamos por el trenzado con el disco redondo manejando 18 hilos. Ya os había mostrado previamente otro cordón con franjas en espiral y el modo de conseguir transformar el dibujo en un zig-zag, pero entonces estábamos trabajando con 16 hilos y los manejábamos en parejas.
Ahora la diferencia es que son 18 y los colocamos en tríos. Pero el resto viene a ser lo mismo.
(la distribución en el disco no es simétrica porque no es posible, pero lo hacemos más o menos, de forma que nos queden enfrentados los colores iguales para los intercambios).
Nos guiamos según el esquema siguiente:
Trabajamos por tríos del mismo color, que tenemos en frente. Comenzamos subiendo el de la izquierda y bajando el de la derecha. Giramos el disco y pasamos al trío de al lado, lo mismo, subimos el de la izquierda y bajamos el de la derecha,...Así hasta que pasamos 6 veces por cada color(o sea, 3 giros completos del disco).
En ese momento, cambiamos el orden de los movimientos en los cruces y lo que hacemos es bajar el de la izquierda y subir el de la derecha. Giramos el disco y pasamos al trío de al lado, lo mismo, bajamos el de la izquierda y subimos el de la derecha,...Así de nuevo hasta pasar 6 veces por cada color (3 giros completos del disco).
He comprobado que no hace falta cambiar el sentido del giro del disco, basta con cambiar el orden de movimientos de los cruces y ya se va formando el zig zag en el cordón.
La segunda está hecha con el disco cuadrado y un trenzado que ya he explicado en entradas anteriores, incluyendo videotutorial, con la diferencia de que hoy añadimos abalorios en la estructura central:
La he hecho con 6 hilos arriba en granate (colocados del 3 al 8) y 4 abajo en rosa (del 14 al 17).
La secuencia de movimientos como sigue:
6 a E y 5 a e
16 a 6 y 7 a 16
17 a 7 y 8 a 17
e a 8
15 a 5 y 4 a 15
14 a 4 y 3 a 14
E a 3
Si queremos incluir abalorios en el centro , como en mi caso, los añadiremos en el hilo central, cuando hacemos el cruce 5 a e ó 6 a E.
Si los quisiéramos en los laterales, los incluiríamos al subir e a 8 ó E a 3.
Como no son muchos abalorios, no hace falta tenerlos enhebrados, lo vamos haciendo a medida que los necesitamos.
Al principio se teje un poco sin abalorios para que la zona cercana al cierre quede despejada y, después, ya comenzamos a añadirlos. Lo haremos en un cruce sí y en el siguiente no, para que no se nos atropellen. También tendremos en cuenta de enhebrar el abalorio una vez en el hilo del 5 a e y la siguiente en el hilo del 6 a E porque quedan mejor distribuidos (mirando uno para cada lado en el tejido) (ese hilo lo cruzamos antes que el otro, para que el abalorio quede por delante en el tejido).
Puede que la explicación parezca complicada pero es muy sencillo, solo son algunos trucos que he visto que favorecen el resultado.
Llegado el final dejamos otro trocito sin abalorios para rematar y poner los cierres que gustemos.
Esta vez y, para variar también, los remates han sido de corsetería:
Una lleva un vistoso botón que se engancha a un ojal hecho con una trenza del final de los propios hilos bien rematada por debajo. Y la otra un corchete gigante cosido por debajo, que queda escondido en la parte final de la pulsera y se engancha en el bucle inicial (también rematado con hilo y aguja), además al final de la pulsera le rematé con uno de los cordones y dejé unos flecos cortos colgando.
Y aquí las tenemos expuestas juntitas: