Vamos a coger en este caso una jarra que tenemos en casa pero esta técnica la puedes hacer con cualquier objeto decorativo esté o no pintado. Queremos aclarar que con estas pinturas no imitamos el óxido, lo oxidamos realmente.
Vamos a necesitar los siguientes materiales de manualidades: imprimación blanca multisoporte, pintura acrílica Americana color marrón chocolate, pintura Magic Metallics base color bronce, patina oxidante Magic Metalic verde y paletina nylon. (Todos los materiales de manualidades utilizados aquí los tienes disponibles para la compra más abajo).
Comenzamos aplicando una mano de imprimación a nuestra jarra y dejamos secar.
A continuación, una mano de pintura Americana chocolate y dejamos secar.
Ahora, damos una mano de base bronce Magic Metallics en cantidad generosa y dejamos secar lo justo. Lo justo en este caso es que cuando esté recién seco hay que dar el siguiente paso. Es decir, en aproximadamente 1 hora o 2 horas estará seco y listo para el siguiente paso.
Para finalizar vamos a oxidar nuestra jarra. Hace poco más de una hora que hemos dado nuestra base de bronce y ahora la pieza estará seca pero fría y este es el momento perfecto para dar la patina oxidante. Si esperamos a que pase más tiempo antes de dar la patina también oxidará pero es preferible hacerlo antes para un mejor resultado. Esta pátina se sirve con un tapón pulverizador y en realidad es un ácido que ataca sólo al compuesto metálico de la base bronce. Simplemente colocamos el tapón en el bote de patina verde y pulverizamos a unos 20 cm. sobre la jarra intentando que caiga por todos los huecos, no importa si salen “chorreones” pues esto dará un efecto más auténtico. Pasadas 24 horas veremos que el ácido o patina ha hecho efecto y ha creado el óxido verdoso muy distribuido y con ricos matices. Llegados a este punto podemos incluso volver a dar una segunda mano de ácido por si quisiéramos más fuerza.